El gol sale a precio de oro. La gran apuesta realizada por el Villarreal para potenciar su juego ofensivo no está siendo rentable hasta la fecha. El club apostó fuerte, con una elevada inversión económica, en futbolistas con un currículo deportivo muy contrastado en cuanto a su estadística goleadora. Si algo se le intuía a principio de temporada al Submarino era su potencial ofensivo. La propuesta fue fuerte con 20 millones por la contratación de Gerard Moreno, con el agravante que el club ya poseía un 50% de sus derechos, más los aproximadamente 18 millones por Toko-Ekambi y los alrededor de 9 que se pagaron al Milán por Bacca.

Además, el club amarillo ya se había gastado con anterioridad sobre los 12 millones de euros en Sansone, junto a los 11 de Fornals, más otros 11 en este último mercado de invierno en Iborra. Se pensaba que el gol marcaría el futuro de los amarillos. Y si algo ha lastrado al Villarreal ha sido, precisamente, la alarmante falta de puntería que se viene poniendo de manifiesto jornada a jornada. Después de 23 partidos de Liga, jugadores con una calidad contrastada cuentan con unas cifras anotadoras ridículas.

Tras 23 encuentros, futbolistas como Gerard, Bacca o Toko-Ekambi poseen unas datos paupérrimos cara a la puerta contraria con 4, 4 y 3 goles, respectivamente, unos números un tanto llamativos en lo negativo para un club con 140 millones de presupuesto. El gol de los delanteros le sale a casi 4,4 millones de euros a fecha de hoy, sin contar con la inversión efectuada por Sansone, cedido al Bolonia en enero.

La medular, tampoco / Pero no solo los datos de los delanteros, en cuanto a la eficacia rematadora se refiere, son nefastos. Los números de la segunda línea de ataque también van a la par en cuanto a la negatividad en eficacia. Solo Cazorla, que llegó a coste cero y es una de las fichas más bajas del plantel, puede presumir de registros acordes a la categoría de un centrocampista de un equipo europeo como es el Villarreal. El Mago asturiano ha logrado tres dianas.

La aportación de la segunda línea ha sido paupérrima, más teniendo en cuenta la calidad que se le presupone a jugadores como Fornals, Iborra, Trigueros o Cáseres. Entre los cuatro solo suman un par de goles, los logrados por el castellonense y por el futbolista incorporado por 11 millones de euros en enero.

Javi Calleja ha logrado minimizar los errores defensivos del Villarreal en su regreso al banquillo de la Cerámica. El rendimiento global en el juego colectivo, tras el cambio a una defensa de tres centrales y dos carrileros, ha logrado mejorar el rendimiento colectivo de un grupo angustiado por los malos resultados, pero también por su falta de eficacia goleadora. En Valladolid se volvió a demostrar que la inversión efectuada en dotar de pólvora al juego de ataque no ha obtenido los mejores resultados. Y el Villarreal necesita el plus de sus cracks para sumar de tres en tres.

MUCHOS NERVIOS / El Villarreal sigue siendo víctima de sus nervios y del estrés emocional de luchar por abandonar una situación impensable en agosto para una de las seis plantillas mas costosas de LaLiga. Por ello, la gran asignatura pendiente de Calleja es recuperar el plus diferencial de sus estrellas… y los goles de futbolistas que debieran ser determinantes como Gerard, Bacca, Toko-Ekambi y Fornals fundamentalmente. Si el Villarreal quiere continuar en Primera necesita del factor diferencial de sus cracks.