Después de ratificar a Zinedine Zidane en conversación telefónica que su decisión de abandonar el Real Madrid es firme y muy firme, según la COPE, Cristiano Ronaldo intentó por todos los medios que Portugal no acusara su contencioso con Hacienda y el club blanco en su estreno en la Copa Confederaciones ante México. Al parecer, el portugués reiteró al técnico francés que se quiere marchar de España: «Me voy porque me tratan como un delincuente».
En el campo, Cristiano cumplió de sobra, pero su selección dejó escapar a última hora un triunfo que ya sumaba gracias a los goles de Quaresma y Cédric, con la participación previa de la estrella madridista. Un cabezazo de Héctor Moreno, en el tiempo añadido, amargó el debut a los campeones de Europa, extrañamente inestables en defensa.
Fue precisamente Ronaldo quien tiró de la selección portuguesa para neutralizar la ambiciosa salida de México tras casi un cuarto de hora sin entrar en contacto con la pelota. Empezó con un zurdazo al larguero, que precedió a un gol de Pepe, anulado por posición previa de fuera de juego del central gracias a la asistencia del VAR, y siguió creciendo gracias a su facilidad para asociarse con Quaresma, el otro gran protagonista en los lusos.
Ochoa evitó en dos ocasiones casi seguidas que Portugal se adelantara, pero estuvo vendido en la jugada que acabó con el primer tanto del choque, obra de Quaresma. Pudo haber sido de Ronaldo, que perdió sus opciones al trastabillarse después de un gran control y reaccionó con brillantez para dar una asistencia a su compañero (m. 35).
ERRORES ATRÁS // En la mejor situación para poner en práctica su idea de protegerse y explotar el juego directo, Portugal se dejó empatar. Rui Patricio solventó la primera, pero no pudo hacer nada en la segunda. Un error defensivo de Guerreiro permitió a Vela asistir a Chicharito (m. 45). Entre medias, Ronaldo habilitó con un gran taconazo a Quaresma, quien lanzó fuera por poco.
El segundo tiempo transcurrió equilibrado y con pocas opciones de que uno u otro equipo despegara hacia la victoria hasta que comenzó a funcionar de nuevo la sociedad Ronaldo-Quaresma. Ochoa neutralizó remates francos del extremo del Besiktas y de André Silva, que acababa de salir por Quaresma, pero acabó batido por el lateral Cédric tras un desvío de Herrera, en una jugada iniciada por Ronaldo (m. 86).
Una grave distracción defensiva impidió que Portugal pudiera disfrutar de un triunfo que ya saboreaba. Un córner lanzado por Giovani dos Santos fue rematado por Moreno ante un despistado Fonte (m. 91) y Ronaldo y sus compañeros se marcharon con la contrariedad dibujada en sus rostros. El madridista fue elegido mejor jugador del partido y habló, pero solo del encuentro.
