Una mala noche la tiene cualquiera, pero no todo el mundo acepta igual sus errores. Cristiano Ronaldo tuvo en el amistoso ante Bulgaria (0-1) un partido para olvidar. Falló un penalti, erró una ocasión clarísima y fue incapaz de marcar en sus 14 disparos. El astro del Madrid acabó desesperado y maldiciendo absolutamente todo, una imagen, por otro lado, que tampoco es demasiado novedosa.

No está fino Leo Messi desde los 11 metros, pero su principal oponente tampoco está viviendo sus días más acertados con laspenas máximas. Este punto era quizá el único en el que Cristiano parecía más seguro que el argentino, pero el portugués ha lanzado cuatro penaltis desde el 21 de febrero y ha fallado tres, los dos últimos de forma consecutiva, un vía crucis en plena Semana Santa.

STOYANOV, BESTIA NEGRA

Aquel 21 de febrero el delantero topó con Kameni en La Rosaleda. Después, probó suerte en tres lanzamientos más y solo marcó ante el Levante (2 de marzo). El 20 de marzo envió su disparo por encima del larguero de la portería defendida por el sevillista Sergio Rico y este viernes fue Petar Stoyanov quien repelió su lanzamiento en el amistoso contra Bulgaria en Leiria. Tampoco estuvo fino Cris en el rechace posterior, que envió fuera.

Le sonaba la cara del meta búlgaro a Cristiano, ya que Stoyanov le paró también un penalti en el Ludogorets-Real Madrid de la temporada pasada. Aunque atraviesa una mala racha, el porcentaje de la estrella es notable, ya que ha convertido 90 de los 108 penaltis que ha lanzado como profesional, lo que supone un 83%. Con la camiseta blanca, ha transformado 65 de 75.

MESSI, SUÁREZ Y NEYMAR

Cristiano y Messi son los jugadores que más penaltis han fallado en la Liga (tres cada uno), sin contar el penalti que Messicedió a Suárez. El uruguayo, mientras, ha fallado dos lanzamientos, al igual que Neymar, que suma cuatro errores contando también el partido de Champions ante el Roma y el deCopa frente al Valencia.

En el amistoso ante Bulgaria tanto Cristiano como Pepe, que tuvo también una floja actuación, jugaron los 90 minutos una semana antes del clásico del Camp Nou. El central regaló el tanto de la victoria a los búlgaros y contribuyó también en el particular vía crucis de Cristiano.