Los caminos de Rusia y Croacia se cruzan en Sochi (20.00 horas), en un encuentro histórico tanto para unos como para otros. Por un lado, la Rusia de Cheryshev, que afronta contra Croacia el partido más importante de su reciente historia, ya que en caso de victoria igualaría su mayor logro en unos Mundiales: las semifinales de Inglaterra 1966.

Entonces bajo los palos estaba Lev Yashin y ahora Ígor Akinféev, el héroe de los octavos de final, ya que detuvo dos lanzamientos en la tanda de penaltis, que eliminó a España. Como novedad, el jugador del Villarreal apunta a volver al once, después de ser suplente ante la Roja.

Por otro lado, la Croacia de Modric y Rakitic. Con una nueva y talentosa generación, se enfrenta a Rusia con el listón fijado en el Mundial de Francia 98 por el inolvidable equipo de Suker, Prosinecki, Boban y compañía, que solo cayó en semifinales a expensas del conjunto anfitrión.