El legado que dejó Johan Cruyff se observa en la vigencia de las enseñanzas que impartió. Quien fue llamado el profeta del gol fundó una escuela futbolística que va arraigando con sucursales en varios puntos del planeta a través de sus antiguos discípulos. La etapa pedagógica de Cruyff como entrenador fue intensa y breve, repartida en los dos clubs de su vida: dos temporadas y media en el Ajax (1985-87) y ocho en el Barça (1988-96). Transcurridos 20 años de su magisterio, las sagradas escrituras pueden leerse mejoradas por una caligrafía más pulcra. El rondo ya no es un ejercicio denostado y catalogado de frívolo, todo el mundo conoce el juego de posición, han vuelto los tres delanteros... El 3-4-3 que recientemente homenajea Luis Enrique es un buen ejemplo.

No hay mayor ejemplo, sin embargo, que comprobar que más del 80% de los 77 futbolistas que tuvo en el Barça son técnicos. Una proporción parecida se observa en sus discípulos del Ajax, con la particularidad de que tres (Rijkaard, Van Basten y Danny Blind) han sido seleccionadores. Como lo es Lopetegui.

Seguramente la razón principal por la que se sacaron el curso de entrenador sea prosaica y resida en que es la posición más próxima al terreno de juego una vez la edad les retira, confiesa Lluís Carreras: «Soy entrenador porque es lo más próximo a jugar a fútbol cuando dejas de ser futbolista», dice el extécnico del Zaragoza, Mallorca, Sabadell...

«Control y posición»

La misma respuesta de Julio Salinas, que obtuvo el carnet de entrenador, pero nunca llegó a ejercer. «Todos deseamos seguir ligados a este mundo y solo hay tres opciones: ser técnico, ser director deportivo o ser comentarista». El exdelantero eligió la última vía «por comodidad».

Pero Salinas se conoce al dedillo la biblia de Cruyff tras seis temporadas escuchándola a diario. Llegó al Camp Nou procedente del Athletic de Javier Clemente tras una breve escala en el Atlético de Madrid. «Cruyff fue un adelantado de su época», sentencia. Como delantero escuchó nuevas acepciones del juego, innovaciones desconocidas hasta entonces. Un nuevo vocabulario que daba sentido a los números como el cuatro y el seis. «Hablaba de abrir el campo, de ocupar todos los espacios, de buscar la segunda línea, de recibir de cara, de jugar profundo por las bandas...», recita.

Carreras recuerda básicamente palabras como «control» y «posición», como si fueran suficientes para explicar un sinfín de conceptos. «Él demostraba lo que decía: enseñaba las cosas y pasaban como él decía que pasarían. En los entrenamientos y en los partidos», dice Carreras, que no duda en reconocer que Cruyff fue el técnico que más le influyó.

Los ‘pasotas’

Solo 13 de los 77 jugadores que estuvieron a las órdenes de Cruyff en el Barça no han querido saber nada del fútbol después de su retirada. Casos dispersos como Nando, Romario, Luis Figo o Eskurza. Menos en el Ajax. Unos estuvieron con Johan en ambos equipos (Koeman, Rijkaard, Richard Witschge). Otros se han mostrado fieles evangelizadores del libro y según la mayor y menor atracción que sintieron del astro holandés han dibujando una particular galaxia futbolística.