Aún queda mucha competición por delante, pero al Club Voleibol Mediterráneo de Castellón empieza a complicársele la lucha por la permanencia en la Superliga. El equipo castellonense desaprovechó ayer la visita del colista de la categoría, el Electrocash, que se impuso en el Pablo Herrera del Grao, sumando así los tres primeros puntos de la temporada y poniéndose a uno solo de los hombres que dirige Sergio Navarro.

La clave de la derrota local pudo estar en el primer set, el más largo e igualado del encuentro, en el que el CV Mediterráneo tuvo con 24-22 la primera oportunidad para adjudicárselo. Tal vez acusando la presión de lo mucho que había en juego, los castellonenses dejaron escapar esta pelota de set, al igual que ocurrió con las cinco de que dispusieron a continuación. En cambio, el equipo cacereño no falló y aprovechó la primera que tuvo para anotarse la primera manga por 28-30 y situarse con ventaja.

El CV Mediterráneo acusó anímicamente este golpe y en el segundo set rindió muy por debajo de lo que acababa de verse sobre la pista, lo que facilitó que el Electrocash se lo adjudicara por 17-25.

Cuando peor se le habían puesto las cosas, el equipo castellonense supo sacar fuerzas de flaqueza para plantar batalla hasta que consiguió anotarse el tercer set por 25-19 y recortar distancias. Los de Sergio Navarro tuvieron que luchar con uñas y dientes y la clave estuvo cuando con 13-14 abajo encadenaron cuatro puntos para situarse con 17-14. A partir de ahí administraron su renta hasta tener seis puntos de ventaja (24-18).

Pero en el cuarto set, con 8-7 a favor, el CV Mediterráneo cometió varios errores en recepción que permitieron a los visitantes adjudicárselo por 17-25, complicando la situación de los locales.