El Villarreal CF debe dar un golpe en la mesa esta mediodía. No queda otra. El conjunto de Javi Calleja atraviesa por un bache de resultados que convierte el encuentro de hoy ante el Getafe en el Estadio de la Cerámica (12.00 horas, beIN LaLiga) en una auténtica final, de las muchas que habrán hasta el cierre de la temporada, ya que a los amarillos no puede escapársele el estatus de club europeo del que disfruta en las últimas campañas.
La eliminación en la Europa League por parte del Olympique Lyonnais, con una superioridad palmaria de los franceses, debe olvidarse desde ya. El fútbol es el deporte en el que más influyen los momentos, tanto anímicos como físicos, y en el que las dinámicas pueden tirar al traste una buena temporada.
Y precisamente romper esa dinámica es lo que debe hacer el combinado de la Plana Baixa. Cierto es que en cuanto a juego, a excepción de la eliminatoria europea, las prestaciones futbolísticas de los de Javi Calleja han sido buenas, aunque no acompañadas por buenos resultados.
De los últimos cinco encuentros oficiales, tres ligueros y dos europeos, el Submarino solo ha cosechado un empate, la pasada jornada ante el Espanyol. Pero las dos derrotas ligueras ante Real Betis (2-1) y Alavés (1-2) vinieron precedidas de buen juego y con un sinfín de ocasiones desperdiciadas. Y a esas líneas maestras hay que acogerse... olvidando las dos actuaciones ante el OL.
sin margen de error / El compromiso de hoy es más trascendental de lo que parece. Los groguets son sextos con 38 puntos y en caso de victoria alejarían a un Getafe (33) que, en caso de ganar, se pondría a solo dos puntos.
Es por ello que Calleja sabe que no hay margen de error. El preparador madrileño de los amarillos ha realizado mucho trabajo psicológico con el grupo en las dos sesiones que ha tenido para preparar el choque, consciente de la importancia de los puntos y la necesidad de romper la racha.
Para ello, el míster del Submarino alineará un once que no diferirá del formado por Asenjo en portería; una línea de cuatro en defensa con Mario y Jaume Costa en los laterales, siendo Bonera el que acompañe a Víctor Ruiz para suplir la baja del sancionado Álvaro González. Por delante de ellos ejercerá de pivote Rodrigo Hernández, con Trigueros y Castillejo como interiores.
El tridente ofensivo partirá con Fornals en la mediapunta y dos delanteros: Bacca, fijo, y el otro saldrá de Enes Ünal, con más opciones, o con la irrupción del ruso Denis Cheryshev.
El Villarreal debe dar hoy un golpe encima de la mesa para dejar atrás a un rival directo y afianzarse en zona Europea.
