Permanecer durante mucho tiempo en un mismo equipo no es algo muy habitual en el fútbol en los tiempos que corren, máxime si se habla de la faceta del entrenador. Los méritos del pasado de poco sirven cuando vienen mal dadas y la cuerda siempre se suele romper por el mismo sitio. Por ese motivo, prácticamente ningún entrenador puede decir que nunca le hayan destituido o tampoco que siempre ha estado dirigiendo al mismo equipo.

En el fútbol más humilde, el de puro, carajillo y rifa del jamón, sucede tres cuartos de lo mismo, y eso que vive alejado de los focos mediáticos y más todavía de las mareantes cifras económicas que manejan sus homólogos profesionales.

Solo un 50% repite

Si se pone todo esto en contexto, concretamente en el Grupo I de Regional Preferente, únicamente se encuentran siete entrenadores que llevan más de una temporada en el mismo club en la actualidad. Sin ir más lejos, cuatro apenas llevan unos meses, ya que no iniciaron la presente campaña: Sergi Escobar relevó a José Ginés en el Soneja, Basilio López a Jacint Guimerá en el Onda, Codrut Aioanei a Juan Carlos Beltrán en el Nules y Adrián Esbrí a Vicente Sancho, que a su vez sustituyó a Iván Ausina, en el banquillo del Almenara Atlètic.

En las antípodas están Poldi Sorribes y Óscar Sanahuja, dos técnicos que asumen en el presente ejercicio su cuarta temporada consecutiva al frente del Vall de Uxó y del Cabanes, respectivamente. Casi una rara avis, con ambos camino del lustro. Eso sí, los dos son dos técnicos que han relanzado a sus equipos.

Dos ‘clásicos’

Poldi Sorribes cogió a una UDE que prácticamente languidecía en Preferente y, un año y medio después, la llevó hasta la última eliminatoria de la promoción de ascenso, donde solo el Atzeneta le dejó sin su ansiado regreso a Tercera División. Actualmente, los valleros están en la terna de candidatos por disputar el play-off. Por su parte, Sanahuja cogió a un Cabanes alicaído en Primera Regional y lo ha devuelto a su máximo esplendor, con un histórico ascenso a Preferente tras 25 años de peregrinación por el desierto, e ilusionarse con el play-off el curso pasado.

Otros entrenadores como Dani García, que encadena su tercera campaña en el Castellón B, con una gran labor tanto en la parcela deportiva como en la formativa, o Sergio Catalá, que vuelve a dirigir en Preferente con el Alcalà tras un breve paso con el Alqueries, están cuajando un gran trabajo en sus equipos. Por su parte, un casi novel como Vicente Pastor en l’Alcora o el veterano Paco Sáiz en el Alqueries suman dos temporadas en sus respectivos equipos en esta campaña 2019/20.

Pero también están los que ya estuvieron y ahora han vuelto, como Juanjo Edo en el San Pedro, con un paréntesis en el Almazora, y Óscar Calleja en un Burriana que también apunta alto este curso. La dificultad es máxima en el banquillo de cualquier categoría. Este curso debutaban en sus equipos tres técnicos y dos de ellos continúan. Se trata de Ramón Llopis en el Benicarló y Javier Balaguer en el Almazora.