Evidentemente, nadie esperaba en el seno del Submarino sumar tan solo un punto ante la visita del colista, el SD Huesca. Pero en el fútbol de élite las matemáticas no existen, las plantillas son súper profesionales y los cuerpos técnicos y futbolistas de cada entidad viven por y para el próximo encuentro. Nadie regala nada. De hecho, el conjunto oscense acumula seis jornadas sin conocer la derrota, aunque cinco de dichos encuentros se saldaron en empate, por tan solo una victoria. Un rival enrachado que, si hubiera logrado algún triunfo más en esta dinámica, todavía lucharía por una permanencia que tiene prácticamente imposible.

Pero dicho empate no terminó de digerirse bien en las entrañas del Villarreal. La plantilla, y en su defecto el cuerpo técnico, había marcado en rojo en el calendario este compromiso. Solo valía la victoria. Un triunfo que hubiera puesto el número 42 en el casillero de puntos groguet, pero que, por ahora, los de la Plana Baixa solo pueden contemplar la cifra de 40 unidades. Faltará algún punto más para salvarse.

Es por ello que, tanto de puertas para dentro como hacia afuera, el empate ante el Huesca fue «decepcionante» para todos los componentes del vestuario groguet. Así de claro lo reflejó uno de sus capitanes y voz autorizada como es Mario Gaspar, quien no ocultó el sentir de los futbolistas por no ganar al conjunto aragonés, ya que el triunfo les hubiera dado virtualmente la permanencia en Primera División.

SENSATEZ EN EL BLOQUE / El noveldense no tapó el mal sabor de boca tras el choque en el Estadio de la Cerámica. «Ha sido decepcionante este empate porque teníamos los tres puntos que nos hubieran dado la tranquilidad, tras una temporada muy complicada, y ahora deberemos luchar la próxima semana para conseguirlo», señaló el lateral diestro.

El defensa, sin duda, reconoció que tras «tener el partido controlado», el duelo «se rompió» en el ecuador del segundo tiempo, una circunstancia que «no» les vino bien. «Ellos ya lo tenían todo perdido y se han partido en dos, y si ante un rival así no haces el segundo gol, te suelen pillar y lo han conseguido un par de veces y nos han hecho el gol», arguyó.

Ahora, el Villarreal, a tres jornadas para la conclusión de la Liga, está cinco puntos por encima de la zona de descenso y en la próxima visita al Real Madrid: «Hemos estado en situaciones mucho más difíciles. Es un golpe duro porque queríamos cerrarlo ya, pero estamos en una dinámica buena y esperamos poder cerrarlo la próxima jornada».

Incluso sobre el contrincante del domingo, dejó claro que «no nos preocupa la entidad del próximo rival, sabemos que es el Madrid, pero hemos superado momentos mucho más duros. Iremos a Madrid a ganar». «Fue duro pero no podemos bajar los brazos. Hay que seguir y sellar la salvación cuanto antes», finalizó.