Con una imponente ronda de cierre, el estadounidense Bryson DeChambeau superó este domingo al joven Matthew Wolff para conquistar la edición 120 del Abierto de Estados Unidos de golf y alzar su primer título de Grand Slam en el temible campo de Winged Foot.

DeChambeau, de 27 años y conocido por su enfoque científico del golf, desbancó del liderato a Wolff en la cuarta ronda al firmar una tarjeta de 67 golpes, tres bajo par, con la que terminó como el único jugador bajo par en todo el torneo en Winged Foot (Mamaroneck, Nueva York). "No puedo creerlo", dijo el golfista al levantar el trofeo. "Ha sido mucho trabajo duro".

El musculoso DeChambeau, noveno del ranking de la PGA, había comenzado la jornada con una desventaja de dos golpes respecto a Wolff y la terminó seis por delante. Wolff, de 21 años, firmó el domingo 75 golpes, cinco sobre par.

DeChambeau, que sucede en el palmarés a Gary Woodland, se convirtió en el primer jugador desde 1955 en lograr una ronda final por debajo del par para ganar el US Open y el cuarto en conseguirlo en la historia del torneo.

El estadounidense es también el tercer golfista después del legendario Jack Nicklaus y de Tiger Woods en ser coronado en este 'Major' tras ganar también los campeonatos universitarios (NCAA) de Estados Unidos en 2015 y el amateur.

"Estar en este tipo de compañía, nunca lo olvidaré", afirmó DeChambeau.

Antes de conquistar el US Open, DeChambeau tenía otros seis trofeos en su vitrina, el último de ellos el Rocket Mortgage Classic celebrado a principios de julio en el que Wolff quedó también en segunda posición.

De haber mantenido el liderato este domingo, Wolff hubiera sido con sus 21 años el campeón más joven de un 'Major' desde Tiger Woods en el Masters de Augusta de 1997.

Ciencia y musculatura

A su pasión por aplicar principios científicos a este deporte, que le llevan a portar en el campo una brújula con su cuaderno de bitácora, DeChambeau añadió una nueva potencia física desarrollada durante los meses de parón por la pandemia de coronavirus.

El golfista subió 20 kilos de peso a base de trabajo en el gimnasio y una dieta alta en proteínas, para regresar al circuito con una evidente transformación física.

Esta musculatura le permitió ganar potencia en sus 'drives', como mostró el domingo alcanzando las 325 yardas desde el 'tee' de salida, un récord de distancia para un campeón del US Open.

Desafiando las convenciones, DeChambeau no dudó en asumir una estrategia ofensiva el domingo.

"Trabajé toda mi vida para esto", subrayó. "No tenía tanto miedo de salir de la línea. Había ganado la confianza que necesitaba para la semana".

A base de trabajo, el golfista más científico dio por fin con la fórmula ganadora para un 'Major'. La noche del sábado DeChambeau fue el último jugador en abandonar Winged Foot, trabajando en su juego hasta el anochecer.

"Seguro que valió la pena", dijo. "Tan duro como es este campo, conseguí jugar a la perfección".

El sudafricano Louis Oosthuizen, ganador del Abierto Británico de 2010, quedó en un lejano tercer lugar con 282 golpes, uno por delante del estadounidense Harris English después de que ambos dispararan 73 el domingo.

El número uno mundial, Dustin Johnson, fue de menos a más en el torneo y terminó en la sexta posición con 70 golpes el domingo, para un total de 285.

Decepción para los españoles

En la última jornada, el viento no sopló tan fuerte en el campo de Winged Foot, uno de los más complicados del mundo, donde no pudieron superar el corte figuras como Tiger Woods o Collin Morikawa, ganador del Campeonato de la PGA en agosto.

El español Jon Rahm, segundo del ranking mundial, se despidió con otra decepcionante ronda de 73 golpes, tres sobre par, con cinco bogeys y cuatro eagles, para terminar en el vigesimotercer lugar. Rahm entró al fin de semana con pocas opciones de estrenarse como ganador de un Grand Slam y lograr el primer US Open para el golf español.

El canario Rafa Cabrera llegó al sábado en tercera posición pero desde entonces acumuló dos malas actuaciones con 74 golpes y, este domingo, otros 78 con los que descendió también al puesto 23.

El Abierto de Estados Unidos, que se disputó sin espectadores, fue el segundo torneo de Grand Slam en 2020 después de que fuera reprogramado desde su fecha inicial de junio a causa de la pandemia de coronavirus. El siguiente 'Major' del calendario será el Masters de Augusta, que se celebrará del 12 al 15 de noviembre.