La historia de Álvaro Rius es la de un castellonense que pasó de entrenar al Vinromà en Primera Regional, a convertirse en director deportivo de uno club grande en Sudamérica: el América de Cali. Rius estuvo siete años como árbitro, llegando a Preferente. Luego formó parte de el cantera del Castellón, como preparador físico de Sergi Escobar. Posteriormente, coordinó la cantera del San Pedro y fue preparador físico del primer equipo, logrando el ascenso a Regional Preferente. También hizo la misma función en el Albocácer y también dirigió al Vinromà, además de ser coordinador en el Alqueries.

La vinculación del castellonense con Colombia llega al realizar unos procesos formativos; uno de los encargados de esos procesos era el asesor del presidente del América de Cali.

El América de Cali es un club grande en Colombia, junto a Nacional, Millonarios... De hecho, la primera impresión de Rius fue buena en cuanto a grandeza: es el equipo con más afición junto a Nacional, también a nivel de títulos, pues ha jugado cinco finales de la Libertadores». «Hubo un año que fue segundo en el ránking Mundial, por delante de Barcelona y Madrid», recuerda. «Pero su grandeza se había quedado atrás respecto a los otros equipos grandes, debido a una crisis fuerte, que le hicieron estar cinco años en Segunda, este periodo le hizo perder terreno», rememora. «Cuando hay partidos clave, mete a 40.000 hinchas en el estadio», contextualiza.

El día a día

Las labores de Rius abarcan varios campos, como «fichar jugadores, coordinar las categorías inferiores, crear una metodología, formar a los entrenadores...: en definitiva, organizar toda la parte deportiva del club». «Ahora estamos creando un departamento de scouting, que no había», señala. Un día en su vida en Cali podría resumirse en «ver al primer equipo y el sub-20; o en la otra sede que tenemos, el resto de equipos de categorías inferiores que tenemos». «La tarde la dedico a reuniones o trabajo más de oficina para organizar departamentos del club, establecer alianzas con clubs europeos --estamos intentando crear una red de filiales--, ver futbolistas que ya han pasado el primer filtro del departamento de scouting....», detalla.

«He aprendido muchas cosas aquí. He conocido el fútbol colombiano a fondo, el funcionamiento de un club grande como América, que es muy diferente a un club europeo. He aprendido sobre la cultura colombiana y, sobre, la forma de trabajar en el fútbol colombiano», enumera.

Meta ambiciosa

Rius se marca el objetivo de «ganar títulos, porque lo pide la afición y la historia lo marca». «Pero, además, debemos crear una estructura deportiva, que no la había, un buen departamento de captación del talento, mejorar la metodología de las divisiones inferiores...», esboza. «Hay talento, pero falta mejorar aspectos tácticos o toma de decisiones», dice.

La situación del fútbol cafetero ha ido mejorando poco a poco. Pero, para Rius, tiene tres importantes carencias, «a nivel de falta de oportunidades para futbolistas jóvenes, la segunda la formación de los entrenadores --a veces aquí ni en Primera las tienen-- y la falta de infraestructuras: hay equipos de Tercera en España con más recursos que algunos equipos de élite».

«A medio plazo me querría volver a España, pero me gustaría mejorar mi situación en América, tras una mejora importante en el club», desea. «Me ilusiona este proyecto, aunque hay mucho por hacer en aquí. Estamos creciendo a nivel estructural y es un proyecto motivante en el que tengo mucha responsabilidad. Me gusta la parte de la dirección deportiva y también la de entrenar, aunque es cierto que en España es difícil hacerlo, si no has sido futbolista. En principio enfocaría mi trayectoria hacia la dirección deportiva», concluye.