Louis Van Gaal ha sido despedido esta mañana por el Manchester United. El técnico holandés, que ha acudido minutos antes de las nueve de la mañana a la ciudad deportiva de Carrington, ha mantenido una breve reunión con el jefe ejecutivo Ed Woodward, quién le ha comunicado por primera vez que no seguiría en Old Trafford. Vía libre para su sustituto, José Mourinho, cuya llegada se espera este martes.
El anuncio oficial de la destitución de Van Gaal se ha retrasado unas horas por dos motivos. La apertura de la bolsa de Nueva York, donde el club inglés tiene una importante participación, y la negociación del finiquito del Tulipán de Hierro, que finalmente percibirá 6 millones de libras de compensación (unos 7,7 millones de euros). Van Gaal tenía contrato una temporada más, hasta junio del 2017. Sus asistentes Frans Hoek y Albert Stuivenberg, así como el analista de vídeo Max Reckers, también han sido despedidos. Se mantiene cierta incertidumbre sobre Ryan Giggs, que tras 29 años en la casa también preferiría no asociarse al proyecto de Mourinho, pero ha recibido una oferta para permanecer en el club.
Dos días después de ganar el primer trofeo desde la retirada de Sir Alex Ferguson, el Manchester United ha prescindido de Van Gaal.El título de la FA Cup logrado el pasado sábado contra el Crystal Palace no ha salvado al holandés, cuyo futuro se había decidido con anterioridad. La falta de conexión con la mayoría de futbolistas y su propuesta de juego, que no se ha acabado de entender en el Teatro de los Sueños, son los principales motivos del adiós.
El Manchester United ha quedado quinto en la Premier League esta temporada y jugará la Europa League el curso siguiente. Resultados insuficientes que han conducido a la solución desesperada de contratar a José Mourinho. Pese al recelo de voces respetadas en el entorno del club como Bobby Charlton o Alex Ferguson, el portugués se identifica como la vía rápida para regresar a la senda del éxito.
