Rusia fue expulsada de los Juegos Olímpicos y de todos los campeonatos mundiales durante los próximos cuatro años después de que la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) la castigase por manipular datos de laboratorio y ocultar supuestos positivos de sus atletas. La medida supone que Rusia no podrá competir como equipo ni en la próxima cita de Tokio ni en los Juegos de Invierno de Pekín 2022, así como en todos los mundiales que se disputen a partir de ahora, incluyendo el de fútbol de Catar.

El comité ejecutivo de la AMA tomó la decisión después de concluir que Moscú había alterado los datos de laboratorio al plantar evidencias falsas y eliminar archivos vinculados a pruebas de dopaje positivas que podrían haber ayudado a identificar sustancias prohibidas en los tests de sangre. La decisión supone otro golpe sin precedentes a la credibilidad del deporte ruso, tras los vetos en los últimos Juegos Olímpicos y campeonatos. Rusada, la agencia antidopaje rusa a la que la AMA ha retirado la acreditación, puede apelar la decisión y el caso será remitido al Tribunal de Arbitraje para el Deporte.

RUSIA ESTARÁ EN LA EUROCOPA / La medida no afecta a la Eurocopa, ya que las competiciones continentales europeas no están afectadas por la suspensión. El torneo ya está en marcha y suspender a la selección rusa supondría un caos que complicaría su celebración. Además, San Petersburgo es una de las sedes del torneo, donde se deben jugar tres partidos de las eliminatorias y un encuentro de cuartos de final.

El primer ministro, Dmitri Medvédev, calificó las sanciones, «dirigidas a deportistas que ya habían sido castigados», de «continuación de la histeria antirrusa» que, según él, «se ha cronificado». El ministro de Deportes, Pável Kolobkov, insistió que su país había hecho «todo lo posible» para solucionar el problema.

Por su parte, Vasily Títov, presidente de las asociaciones deportivas olímpicas de toda Rusia, recomendó a los deportistas rusos evitar el pánico y seguir entrenándose para las pruebas. «Hay que prepararse para los Juegos y no caer en la histeria», demandó el responsable deportivo.

Por su parte, Ígor Lébedev, vicepresidente de la Duma, la Cámara baja del Parlamento, abogó en favor de una «respuesta contundente» del Gobierno ruso. Margarita Pajnotskaya, vicedirectora de Rusada, se limitó a valorar, también de forma muy negativa, la decisión de la AMA. «Aunque ya se esperaba, todo ha acabado de forma deplorable, nadie ha defendido a Rusia», manifestó.

dopaje de estado / Las acusaciones de dopaje de Estado en Rusia se remontan al 2014. Un reportaje de la televisión pública alemana sobre el deporte de élite puso al descubierto los métodos ilegítimos empleados por la que es una de las principales superpotencias deportivas en muchas disciplinas, forzando la creación de una comisión de investigación. Un año después, dicho comité recomendó excluir a los deportistas rusos de los Juegos de Río de Janeiro, mientras goteaban nuevas y escandalosas revelaciones.

En el 2016 se dio a conocer un esquema ilegal que ayudó al equipo ruso a colocarse en la primera posición dentro del medallero de los Juegos de Invierno en Sochi, en el 2014. Con la ayuda de los servicios secretos rusos, se sustituían muestras de deportistas que habían ingerido sustancias ilegales por otras limpias.

Personajes supuestamente implicados en las tramas de dopaje, como Nikita Kamaev, director ejecutivo de Rusada, fallecieron de forma súbita por infarto sin que se le conocieran dolencias cardíacas previas. Otros, como Grigori Ródchenkov, director de dicha agencia, se refugiaron en Estados Unidos, tras haber colaborado para sacar a la luz pública el dopaje de Estado en Rusia. H