Uno de los principales aspectos en cualquier equipo es el balón parado. Los lanzamientos de faltas, penaltis y saques de esquina se han vuelto un aspecto crucial y que decide partidos. Por suerte, el Villarreal CF cuenta en su fútbol base con múltiples y variados recursos a la hora de tomar este tipo de acciones en sus respectivos partidos.

Un buen ejemplo es el del Juvenil A, el cual tiene en sus filas un gran número de lanzadores de primer nivel, como es el caso de Fer Muriel y Andrés Campos. Muriel y Campos llegaron a la cantera grogueta durante su primer año en la categoría cadete y su adaptación al club amarillo fue espectacular en todos los sentidos.

Un hecho, que como los propios futbolistas confiesan, les ayudó a poder explotar su máximo potencial. Así lo recuerda Muriel: «Llegué en la categoría cadete y la adaptación, tanto a los compañeros como al club, ha sido perfecta. Esto se debe todo al compañerismo de jugadores y entrenadores». No obstante, los entrenadores supieron localizar en poco tiempo una de sus principales cualidades, el lanzamiento de libres directos.

Un atributo que durante estos cuatro años vistiendo la camiseta del Villarreal han podido potenciar y llevar a la práctica. Tanto Muriel, como Campos, han marcado varios tiros libres y han asistido a partir del balón parado, pero este tipo de acciones llevan un trabajo diario constante.

Este es el secreto a seguir para Campos: «El año pasado conseguí muchos goles de tiro libre y estoy trabajando todos los días para que este año se repita». Pero Muriel y Campos no son los únicos grandes lanzadores del Juvenil A groguet, ya que el joven equipo cuenta con varios especialistas, por lo que los registros que posee Miguel Ángel Tena son muy variados y eficaces para las diferentes situaciones que plantea cada encuentro. Muriel es conocedor de la gran calidad de sus compañeros: «Nosotros solemos ser los dos lanzadores principales, aunque también hay otros compañeros que lanzan muy bien y hay que seguir trabajando para mejorar cada día».

Todo ello hace del Juvenil A uno de los equipos más temidos de la cantera grogueta y así lo confirma su primer puesto en la clasificación del Grupo VII de División de Honor Juvenil. De hecho, es el equipo más goleador con 54 goles en 20 partidos disputados. Andrés es consciente del buen momento por el que pasan y la dificultad de los equipos contrarios: «Hay rivales muy duros que siempre nos complican las cosas, pero nosotros siempre afrontamos los partidos como si fuera el último y hay que seguir trabajando». Ahora solo queda disfrutar de Muriel, Campos y sus compañeros, que prometen dar muchas alegrías a la afición grogueta esta temporada.