El Villarreal CF está cuajando una campaña prácticamente excelente. A excepción del lunar de la eliminación en la Copa del Rey, el conjunto que dirige Marcelino García Toral está establecido de forma holgada en la cuarta posición del campeonato nacional de Liga en Primera División, en zona de Champions League, así como inmerso en la Europa League, en los dieciseisavos de final, donde se tendrá que enfrentar al Nápoles italiano.

Ahora bien, una de las situaciones que más se está repitiendo en el presente ejercicio radica en el hecho de que, en muchas ocasiones, el equipo presenta una regularidad bipolar, puesto que es uno de los conjuntos más fiables defensivamente hablando, pero por contra no termina de ser uno de los punteros en materia ofensiva, pese a ser muy efectivo.

BUEN BLOQUE DEFENSIVO // El Submarino se está comportando de forma sobresaliente en cuanto a materia defensiva se trata. No en vano, los de Marcelino son el tercer equipo menos goleado de la Liga tras 20 jornadas, donde solo han encajado 16 tantos. Un puesto, el de 3º, que engaña, porque al FC Barcelona, el 2º en dicha clasificación, ha recibido solo un gol menos (15), pero le resta por jugar un encuentro ante el Sporting de Gijón. Muy distanciado está el Atlético de Madrid, que solo ha recibido 8 tantos.

Uno de los artífices de este éxito defensivo es el meta Alphonse Areola, segundo Zamora de la categoría, tras el meta del Atlético Jan Oblak (solo 8 goles en contra en 20 partidos). El cancerbero francés no solo goza del privilegio de tener delante de él a uno de los bloques más sólidos defensivamente hablando de toda la Primera División, sino que, además, es el cuarto de todo el campeonato doméstico que más parada lleva, con un total de 114.

En este ránking de intervenciones exitosas, solo lo superan el meta del Getafe, Guaita (135); el del Málaga, Kameni (130); y el del Real Betis, Adán (121).

Además, la solidez defensiva de un bloque en el que Musacchio, Víctor Ruiz y Mario son los referentes en la zaga, junto a Jaume Costa --recientemente lesionado--, Bailly, Rukavina y Marín.

LE FALTA PEGADA // Pero si la aportación defensiva es el doctor Jekyll, el mister Hyde del Submarino es la capacidad en el remate. El Villarreal es un equipo con mucha efectividad en relación a la fluidez de sus remates a portería. No en vano, los amarillos tienen el promedio de tiros a favor más bajo de la liga española y de todas las ligas importantes europeas.

Un promedio de 8,5 goles por partido no termina de ser una cifra acorde con el cuarto clasificado de la Liga. Además, el combinado groguet es el octavo en la clasificación de equipos máximos goleadores del campeonato. Incluso los propios futbolistas reconocen que deben mejorar el caudal de remates. Una de las pocas asignaturas pendientes de cara a la segunda vuelta. H