De Castalia al cielo. Los restos mortales de Eliseo Ramos, el utillero convertido en símbolo del albinegrismo, partieron este martes desde el estadio, la que fue su casa durante más de medio siglo, para dirigirse hacia otro lugar referencial de Castelló, la concatedral de Santa María, donde se celebraron las exequias fúnebres por el alma del abuelo del CD Castellón.

Eliseo ha recibido la cálida despedida de la gran familia albinegra. Ya está también en los altares del albinegrismo porque, desde su humilde papel de utillero, ha trascendido en la ya casi centenaria historia del Castellón. El presidente Vicente Montesinos le dedicó unas sentidas palabras ayer, a la vez que adelantaba que una de las puertas de acceso a Castalia llevará su nombre.

De ahí que decenas de personas, de todos los ámbitos de la sociedad castellonenca (más allá del mundo del deporte), le ha tributado su propio homenaje que, a través de las redes sociales, también han llegado, desde todos los puntos cardinales de España, de mucha gente que le trató.