La provincia de Castellón acogerá el fin de semana a la élite del motrocrós internacional. Gracias a la firme apuesta de la Diputación de Castellón por la sinergia entre turismo y deporte con el proyecto Castellón, escenario deportivo, el ente provincial trae el Motocross World Championship MXGP 2018, el Mundial de la especialidad, con la celebración de la tercera prueba de la temporada, el Gran Premio de la Comunitat Valenciana, el cual prevén que tenga un impacto económico en toda la provincia estimado en 10 millones de euros.

Una competición que se desarrollará en lo deportivo el sábado 24 y el domingo 25 en el circuito RedSand de Vilafamés —las verificaciones técnicas y otros controles serán mañana—, y que posicionará a la provincia entre los mejores destinos internacionales para la práctica de este deporte.

Ayer tuvo lugar la presentación oficial, en la que el presidente de la Diputación, Javier Moliner, destacó: «Este fin de semana vamos a asistir a uno de los espectáculos más potentes del panorama del motor a nivel mundial, la prueba reina de las dos ruedas sobre tierra, a una competición que llena horas de televisión en los cinco continentes y con una capacidad de exportar la imagen de nuestro territorio, sin duda, fuera de lo convencional».

MÁXIMA EXPECTACIÓN / Hay que tener en cuenta que este Gran Premio de la Comunitat Valenciana de motocrós está generando una gran expectación entre los aficionados de toda España, ya que significa la vuelta a territorio nacional de esta competición tras la última carrera que se desarrolló en Talavera de la Reina en el 2016.

Las previsiones apuntan a que más de 20.000 personas de todo el mundo conocerán la provincia desde mañana y hasta el domingo. Juan José Gimeno, responsable del circuito, indicó que «se ha batido el récord de venta anticipada, superando las 5.000 entradas». «Con ese dato es probable reunir a más de 15.000 espectadores por jornada», remarcó.