El entrenador del Málaga ve a su equipo «con menos presión» tras quitarse en la anterior jornada la pesada losa de ser el único equipo de Primera sin victorias. El 2-1 en La Rosaleda del pasado fin de semana ha provocado «un cambio» en el equipo andaluz que «da esperanza y fe», aunque Míchel es consciente de que a este Málaga, todavía colista, le faltan muchas más «victorias y puntos» para alcanzar un clima de tranquilidad del que ahora carece.

Para el madrileño no es el Estadio de la Cerámica el mejor escenario para dar continuidad a las buenas sensaciones. El Málaga se encontrará, bajo el punto de vista de su entrenador, «a un equipo con jugadores de mucha calidad que puede hacer frente a las bajas y al cansancio», apuntaba Míchel sobre la posibilidad que a los de Calleja les pueda pasar factura el esfuerzo del pasado jueves en la Europa League y las bajas de hasta tres titulares (Álvaro, Trigueros y Castillejo) con las que se presentan a la cita de hoy.

Míchel, que podría repetir ante el Villarreal el mismo once titular que alineó ante el Celta --«si no hay un cambio de última hora es una opción bastante probable», recalca--, también se refirió a unas recientes declaraciones del propietario del club, el jeque catarí Al-Thani, quien anunció la posibilidad de que en el mercado de invierno lleguen algunos jugadores de refuerzo procedentes del PSG. «Todas las ayudas son bienvenidas, de la ONU, Cruz Roja y de jugadores que no puedan tener minutos allí, ojalá», ironizó.