El témino conciencia plena hace referencia a un término de Mindfulness (Terapia de tercera generación proveniente de la meditación oriental).

Uno de los pilares de lo que se ha dado en llamar conciencia plena es el estar centrado en el aquí y ahora, es decir, en el momento presente y además con los cinco sentidos puestos.

Otro pilar es desactivar ‘el piloto automático, es decir, el modo ‘robot’ que utilizamos de forma inconsciente para realizar prácticamente la mayoría de tareas que llevamos a cabo a lo largo del día, como por ejemplo, levantarse, vestirse, cepillarse los dientes, desayunar e ir a trabajar. Toda esta serie de tareas cotidianas solemos hacerla con el ‘piloto automático’.

Entrenar con conciencia plena, por lo tanto, significará:

1. Desactivar el piloto automático. Por ejemplo, ponerse las zapatillas y la ropa de entrenar, y lanzarse a correr.

2. Entrenar usando los cinco sentidos.

3. Centrarse en el aquí y ahora.

Pasamos, pues, a explicar cómo se lleva a cabo el entrenamiento con conciencia plena.

primero, pensar

Antes del entrenamiento, dedicar un tiempo a pensar en él, qué dificultades pueden plantearse y cómo solventarlas, qué tipo de sensaciones puede generar, qué grado de sufrimiento implica…Por ello, lo recomendable es antes de empezar, sentarse en algún lugar tranquilo para visualizar el entrenamiento que posteriormente se realizará.

segundo, concentrarse

Entrenar con total atención y concentración en la respiración, en la frecuencia cardíaca, en el trabajo muscular, en las sensaciones corporales, en los pensamientos que van aflorando…

tercero, aquí y ahora

Lo anterior no tendrá sentido si no se entrena en el aquí y ahora. Por ello se debe realizar el entrenamiento pensando únicamente y exclusivamente en lo que se hace. Pensar en el trabajo, en el estudio, en las tareas pendientes, en la próxima competición…lo único que se consigue con ello es que el cuerpo este en un sitio y la cabeza en otra.

También puede darse el caso de restarle importancia por ejemplo a un rodaje e ir bromeando o hablando constantemente, con lo que de esta forma tampoco el atleta estará centrado y concentrado en el rodaje.

Las ventajas de entrenar con conciencia plena son múltiples, pero una de las más importantes es que con ella, se está emulando el comportamiento que se tiene durante una competición, ya que durante la misma, todos van centrados en lo que hacen, en las sensaciones, en la respiración. No hay bromas, ni conversaciones, se tienen los cinco sentidos puestos en la carrera…

Por ello, entrenando con la conciencia plena se tiene la oportunidad de practicar diariamente el estado mental que genera una competición. Además, aumentará de forma significativa la calidad del entrenamiento.

Es obvio que el atletismo como disciplina no implica en principio muchos riesgos, pero hay otras disciplinas como la gimnasia artística, la fórmula 1, salto de trampolín…, que entrenan aplicando la conciencia plena, ya que un despiste entrenando o una falta de concentración, puede resultar muy peligroso para el deportista.

Sin embargo, entrenar así les permite competir de forma brillante, por ello aplicándolo a la práctica del atletismo, los resultados pueden ser, con constancia, sobresalientes.

*Psicóloga Deportiva

twitter: @mvallsbarbera