El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Simeone, solo piensa en fútbol en cuanto al partido de hoy ante el Villarreal, aunque se desmarca de la polémica entre ambos clubs por temas extradeportivos.

A la espera del estado del césped y la climatología en el estadio de La Cerámica, después de las intensas lluvias desde el jueves («Siempre es un campo que drena muy bien», apuntó), el técnico argentino dejó ayer claro que «a nosotros nos interesa lo que sucede en el campo».

Así, avisó de que «vamos a encontrar un equipo que tiene muy buenos futbolistas y un buen entrenador que conoce sobre todo al club. Nos imaginamos un partido complejo. Nos ha costado bastante en los últimos tiempos enfrentarnos al Villarreal, sobre todo en su casa y es un desafío nuevo», enfocó Simeone, cuyo equipo ha perdido en sus tres últimas visitas al estadio de La Cerámica. No gana allí desde 2014-15 (0-1).

¿Por qué? «Porque nos enfrentamos a un gran equipo que nos sabe jugar, que nos ha traído complicaciones y estará en nosotros superarnos e ir a buscar el desafío de cambiar esta línea», contestó el entrenador, que admitió que «cuesta volver a arrancar» tras el parón de selecciones, pero espera que su equipo «se enganche rápido».

Ya dispone de todos sus futbolistas para los entrenamientos desde el jueves. No había podido hacerlo desde hace dos meses, desde la Supercopa de Europa contra el Real Madrid del pasado 15 de agosto. «Valoramos tener a disposición a los chicos que creemos que pueden hacer un buen partido, que pueden sacar adelante el juego y llevar el partido al lugar que queremos», expuso.