La primera edición de la ATP Cup tendrá escrito para siempre el nombre de Roberto Bautista. El de Benlloc cerró este domingo una histórica participación en Sídney con otra victoria ante el serbio Dusan Lajovic (7-5 y 6-1). La sexta en seis encuentros.

Un balance extrarrestre que le permite continuar en el noveno puesto del ránking de la ATP (el mejor de su historia), al haber sumado 340 puntos, que junto a los que tenía antes de la primera cita del año le sitúan con 2.675. Además, ha recortado los mencionados puntos al italiano Matteo Berrettini que ya solo cuenta con un colchón de 195 respecto a él y deberá lograr una buena actuación en el Open de Australia si no quiere que le adelante en la octava posición mundial.

Además, es la primera vez que Bautista celebra seis victorias en un mismo torneo, puesto que en las competiciones de Masters 1.000 si consigues ganar llegas a disputar hasta un máximo de seis encuentros y en Grand Slam siete. Antes del hito de Australia, la vez que más cerca se quedó de lograrlo fue en la catedral del tenis el pasado mes de julio, cuando cayó en semifinales de Wimbledon ante Djokovic, su mejor marca en un grande.

Sin embargo, la gesta del castellonense no sirvió para que España levantase la copa de campeón, ya que Nadal cayó en el duelo de números uno ante Djokovic (5-6 y 6-7) y el punto decisivo en dobles se lo llevó la pareja balcánica, compuesta por el propio Novak y su compatriota Viktor Troicki (3-6 y 4-6).

ABRIÓ EL CAMINO / Rober era el encargado de abrir la final ante el número dos serbio y no falló. En una masterclass, que duró una hora y treinta y siete minutos, recordó al mundo que es un galáctico de la raqueta. Y es que si a su innata habilidad le añades la confianza y el estado físico por el que atraviesa te sale lo que es: uno de los mejores jugadores del momento en todo el circuito si no el mejor.

El inicio del choque fue un resumen de lo que se iba a ver sobre la pista del Ken Rosewall Arena. Un Bautista que rompió el servicio en el primer juego y confirmó la rotura con su saque. Tras ese 2-0 reaccionó Lajovic que quería evitar la quinta victoria de Bautista en su quinto enfrentamiento particular y devolvió la rotura, dejando el partido empatado hasta el duodécimo juego, cuando Bautista se adjudicó el set 7-5. En la segunda manga, Lajovic fue desbordado por Bautista, quien consiguió cerrar el parcial 6-1.

Respecto a su triunfo, el benlloquense aseguró que «ha sido un enorme partido, ambos hemos jugado a un gran nivel. Durante el primer set él ha dado un paso hacia adelante y he conseguido frenarlo, ahora solo quiero que gane Rafa», explicaba antes de ver cómo Nadal no podía ante un Djokovic espectacular.

DJOKOVIC AGUÓ LA FIESTA / No en vano, el de Belgrado arrancó a un ritmo imparable y no dejó rastro de Nadal, quien solo mantuvo dos servicios de los cuatro que realizó, para llevarse el primer asalto por un incontestable 6-2. Sin embargo, el mallorquín recuperó su imagen en el segundo set y el partido rozó brillantez tenística dado que el serbio no bajó los brazos. Después de que ambos mantuvieran su servicio en todas las ocasiones el partido se prolongó hasta el desempate, fase en la que el número dos mundial se impuso por 7-4. Djokovic endosó así la novena victoria a Nadal desde 2013 en pista dura.

Tras el 1-1 en el marcador global todo se decidiría en el dobles final, que enfrentó a los españoles Feliciano López y Pablo Carreño con los serbios Djokovic y Viktor Troicki. Nadal prefirió retirarse. «He jugado demasiado tenis los dos últimos días. Mi nivel de energía es más bajo de lo habitual, porque disputé un partido muy largo ayer, muy largo antes de ayer... Es una decisión del equipo y confío en Feliciano López y Pablo Carreño, que lo están haciendo muy bien. He hecho un esfuerzo los últimos días y mi descanso ha sido inferior a la de la gran mayoría» , comentó Nadal.

EL SUEÑO DE UN GRANDE / Con la ATP Cup finalizada y a poco más de una semana para que empiece el Open de Australia, Bautista comentó: «He disfrutado mucho jugando aquí en Australia y quiero seguir así». Será en Melbourne cuando a partir del 20 de enero compita en la primera gran cita de la temporada. En una pista que se le da bien, sueña con levantar su primer Grand Slam. Está en su mejor momento y lo quiere demostrar.