Pocos conocen al Logroñés y su vinculación con Carles Salvador, actual centrocampista del Castellón. El mediocentro, criado en la cantera albinegra, pasó las tres últimas temporadas en el conjunto de la capital de La Rioja, por eso conoce a la perfección el plantel rojiblanco y también las ideas de su entrenador, Sergio Rodríguez, con el que coincidió en el club de Las Gaunas los dos últimos cursos ligueros.

«Conozco muchas cosas de ellos y está claro que ellos también me conocen muy bien a mí. Al final se contrarresta todo un poco», señala el futbolista, quien augura «un partido muy disputado, abierto e interesante», en el que todos partirán «de cero por el tema del confinamiento y de haber estado más de dos meses parados, lo que frena mucho».

ALABANZAS AL RIVAL / Carles Salvador es, sin lugar a dudas, el mejor espía para el Castellón y el técnico Óscar Cano, además de sus propios informes, tirará mucho del futbolista castellonense para preparar el encuentro del próximo sábado 18 de julio en La Rosaleda de Málaga (horario por confirmar). «Es un equipo muy completo. Llevan una base importante de los últimos años, con gente que está jugando junta durante mucho tiempo. Han hecho las cosas muy bien y por eso están ahí arriba. Tienen un vestuario muy profesional y con mucha experiencia en la categoría», avisa el mediocentro del Castellón.

«La temporada pasada estuve con ellos luchando por el mismo objetivo que ahora en el Castellón, pero esta vez seré oponente suyo. Será curioso enfrentarme contra muchos futbolistas con los que estuve conviviendo las tres últimas campañas en el Logroñés, pero así es el fútbol», asegura el jugador albinegro.

Carles Salvador llegó al Logroñés el verano del 2016, procedente del Alcoyano, y en julio del 2019 se incorporó al Castellón como gran apuesta del club que preside Vicente Montesinos. En sus tres temporadas en Logroño (del 2016 al 2019) disputó una fase de ascenso que se fue al traste en la segunda ronda ante el Hércules justo la campaña pasada.

En total disputó 113 partidos de Liga, con 7.214 minutos, seis goles, 18 cartulinas amarillas y una tarjeta roja. Aterrizó con buen pie en Logroño, ganándose el cariño de la afición rojiblanca, por eso su salida del equipo hizo derramar más de una lágrima entre los seguidores riojanos.

Pero había llegado su momento de volver a casa y Carles Salvador no dudó en aceptar la oferta albinegra. El centrocampista se formó en las secciones inferiores del Castellón. Siendo juvenil, emigró a València para jugar en su juvenil y en el Mestalla (2011-12). Luego fichó por el Olímpic de Xàtiva y estuvo tres campañas en el Alcoyano antes de incorporarse al conjunto de Logroño.