Castalia acelera para estar listo el 1 de septiembre, la fecha prevista para el Castellón-Mestalla, primer partido en casa de la temporada, en la segunda jornada, una semana después del estreno de los albinegros en Sabadell. Con todo, ni club ni el consistorio se atreven a afirmar, con el sello oficial, que acoja este partido, a expensas del remate final de las obras y el consiguiente informe técnico que dé el visto bueno, desde el punto de vista de la seguridad, a que los dos goles, completamente reformados, puedan acoger, en 19 días, a miles de aficionados.

Ayer lunes, los operarios ultimaban gol sur alto con operaciones de pintura y limpieza, ya completamente cerrada la grada. Al mismo tiempo, el grueso de la actividad se trasladaba a gol norte alto, en lo que será el remate final a la reforma estructural de estas zonas del estadio. Fuera del mismo, el avance de las obras es evidente: la calle Huesca se reabrió al tráfico el viernes.

En previsión de que Castalia no llegue a tiempo para el 1 de septiembre, el Castellón ya ha recibido el visto bueno del Valencia y ha trasladado la situación a la federación española, con vistas a un hipotético intercambio en el orden de los encuentros con el Mestalla (primero sería en Paterna; en la segunda vuelta, en el coliseo de la avenida Benicàssim).