Castellón pondrá hoy fin a tres intensos días de ciclismo de primer nivel por la provincia de Castellón, después de que el lunes la etapa concluyese en Peñíscola y ayer la totalidad de la nutrida caravana que forma parte de la Vuelta a España se tomase un respiro en la segunda jornada de descanso de esta edición de la ronda española. Y en la despedida se disputará la etapa más esperada y una de las más interesantes de este año, que finalizará en el Mas de la Costa.

Será sobre las 17.40 horas --si el vencedor rueda a una media de 38km/h (horario intermedio previsto)-- cuando culminará la 17ª etapa, con la llegada al Mas de la Costa, que ha sido bautizado como el infierno de esta edición por su dureza, pese a que solo son 3,8 kilómetros de ascensión. Muchos han sido los que lo han comprobado, puesto que desde que se anunció que esta cima sería final de etapa no han dudado en escalarla y los que la han podido completar sin poner el pie en el suelo han sufrido de lo lindo.

El Mas de la Costa se hará muy duro para los supervivientes de esta Vuelta, puesto que llega tras dos semanas y media de competición, y después de etapas también de mucha dureza, por lo que la cima de Llucena podría ser decisiva cara a conocer el nombre del vencedor final, aunque todavía restarán la crono del viernes y la llegada al alto de Aitana del sábado. No conocer las rampas puede jugar una mala pasada, por lo que algunos de los favoritos, como es el caso del líder Nairo Quintana, se acercó poco después de anunciarse el recorrido.

Habrá que ver como superan el inédito Mas de la Costa, el descubrimiento de este año por parte de la organización, los componentes de la serpiente multicolor, puesto que hay rampas del 22% y la pendiente media de los 3,8 kilómetros alcanza el 12,5% (ver gráfico). Un auténtico muro que llegará tras haber recorrido los ciclistas casi 174 kilómetros, puesto que la etapa tiene 177,5. H