Ya se sabe que quien perdona, lo acaba pagando. Y eso es precisamente lo que le está pasando al CD Castellón en las últimas jornadas. El conjunto albinegro juega bien, genera ocasiones... pero falla en los metros finales y así es difícil sumar victorias. Anoche, contra el Girona FC, el equipo que dirige Óscar Cano volvió a pecar de acierto y el conjunto catalán, que apenas hizo nada, acabó llevándose los tres puntos del Estadio Castalia gracias a un gol de Franquesa al filo del descanso. Los albinegros tuvieron opciones de empatar, pero acabaron también muy condicionados por otra polémica jugada en el área de la que no se pudo sacar nada.

Sorprendió Cano con las rotaciones y con su planteamiento. Obligado a dar descanso a algunos de los habituales por lo apretado del calendario, el técnico albinegro optó por jugar con un sistema 4-4-2, con César Díaz e Igor Zlatanovic en ataque; y dio la titularidad al debutante Guillem Jaime en el lateral diestro, a Óscar Whalley en la portería y a Álvaro Fidalgo en el centro del campo.

En el resto del equipo, los de siempre. Y con ellos comenzó proponiendo el conjunto de la capital de la Plana. Los albinegros querían tener el esférico, pero debían sobreponerse a la asfixiante presión que ejerció desde el primer minuto sobre ellos el Girona.

El Castellón, poco a poco, lo fue consiguiendo y empezó a aproximarse al área catalana por mediación de Marc Mateu por la banda izquierda y de César Díaz por la derecha. Muy activo se vio al delantero manchego en el primer tiempo, pero ni Zlatanovic ni Fidalgo en dos ocasiones casi consecutivas acertaron a culminar sus centros al área. El Girona, mientras tanto, se limitaba a salir a la contra, pero sin inquietar en exceso a Whalley. Solo tuvo que sacar de puños el portero albinegro un buen balón del conjunto catalán mediada la primera mitad del choque después de un saque de esquina, pero poco más.

El cuadro de Cano seguía a la suya, con mucha actividad por ambas bandas, donde Guillem Jaime y Fidalgo apoyaban a sus compañeros con buen criterio, y en jugadas a balón parado. En un saque de esquina de Marc Mateu a punto estuvo Lapeña de abrir el marcador pero su remate de cabeza se marchó fuera. Y un centro de Guillem Jaime que le caía a César Díaz dentro del área fue interceptado por Ramalho. En otra, Zlatanovic no llegaba de milagro a rematar otro pase del albaceteño y Juan Carlos se hacía con el esférico.

Estaban siendo los mejores minutos del Castellón, con buen juego, toque y ocasiones. Pero entonces llegó el jarro de agua fría con el gol del Girona en un error defensivo, y puntual, de la defensa albinegra. Un lanzamiento de Sylla le pasó por debajo de las piernas a Gálvez, Guillem Jaime no llegaba a la marca, dejando solo a Franquesa para que este golpeara el balón y sorprendiera a Whalley. Era el minuto 42 y no hubo tiempo para más.

El segundo tiempo arrancó de forma similar. El Girona presionando arriba y el Castellón buscando el dominio del esférico y poniendo las ocasiones. Rubén Díez y Gus Ledes fueron los primeros en probar fortuna con dos tímidos lanzamientos, pero la defensa catalana no pasó apuros.

Las fuerzas estaban muy igualadas y entonces llegó la polémica. Si en el partido contra el Lugo le anulaban un gol olímpico legal a Marc Mateu anoche, bajo la atónita mirada de los albinegros, el colegiado Ortiz Arias no señalaba un posible penalti cometido por Calavera sobre Satrústegui, jugada a la que precedían unas manos dentro del área tampoco pitadas y otras, al parecer, del propio defensa del Castellón. El árbitro revisó con el VAR y, cuando parecía que lo iba a pitar e, incluso, la televisión así lo dio, señaló falta en ataque.

Esa jugada dejó bastante tocados anímicamente a los albinegros y Cano buscó la reacción de los suyos dando entrada a Paolo Fernandes (por César Díaz), Josep Séñé (por Rubén), Muguruza (por Marc Mateu) y Jordi Sánchez (por Guillem Jaime) entre los minutos 67 y 75. También entró al verde en la recta final Carrillo y el Castellón se la jugó con todo lo que tenía en el banquillo.

No era un mal planteamiento, pero el conjunto albinegro estaba todavía en shock y el Girona tiraba de su veteranía para conseguir que el marcador no se moviera. De hecho, en los últimos 15 minutos apenas se jugó a nada, con paradas constantes en el juego y errores en los pases.

Solo en la última jugada el encuentro tuvo Lapeña la oportunidad más clara para haber establecido la igualada a un gol, pero el central no acertó a rematar un gran pase de Paolo Fernandes.

- Ficha técnica:

0 - CD Castellón: Whalley; Guillem Jaime (Muguruza, m.74), Satrústegui, Lapeña, Gálvez; Gus Ledes (Carrillo, m.82), Rubén Díez (Señé, m.67); César Díaz (Paolo Fernandes, m.67) (Jordi Sánchez, m.74), Marc Mateu, Fidalgo y Zalatanovic.

1 - Girona FC: Juan Carlos, Ramalho, Gumbau, Bernardo; Calavera, Franquesa, Monchu, Cristóforo (Stuani, m.61), Gumbau; Nahuel (Ibrahima, m.61)y Mamadou (Pablo Moreno, m.82).

Gol: 0-1 m. 41: Franquesa.

Árbitro: Ortiz Arias, del comité madrileño. Amonestó a Rubén Díez, Marc Mateu, Gus Ledes y al segundo entrenador, Elíes Martí por el Castellón y a Mamadou y Jordi Calavera por el Girona.

Incidencias: partido jugado a puerta cerrada en el estadio Castalia con 18ºC.