Al mismo ritmo que las carreras populares que tienen lugar durante el año, las San Silvestre es un fenómeno en constante crecimiento que, cada año, reúne a más adeptos, a la vez que nuevas localidades se suman a la hora de despedir el año corriendo.

Aunque esta prueba toma el nombre del último día del año, las San Silvestre van mucho más allá del 31 de diciembre. De hecho, en nuestra provincia se han disputado desde Nochebuena a razón de, al menos, una durante los últimos ocho días del 2016. Ya son más de 30 las localidades que, en mayor o menor grado, organizan estas pruebas, que combinan deporte y diversión.

Castellón dio el pistoletazo de salida a 2.000 participantes, que recorrieron 3,7 kilómetros. La mayoría se lo tomó con calma y humor (abundaron los disfraces con tintes navideños), pero una buena parte lo afrontó como una carrera competitiva más. Como Eric Peñalver, su vencedor.

La San Silvestre de Benicarló, la más antigua de la Comunitat Valenciana (39 ediciones), citó a más de 600 inscritos, que cubrieron 2,5 kilómetros, con triunfos de Daniel Ramia y Carla Masip. (Informa: Eloy Cerdá). La de Alcalà, de cuatro kilómetros, fue para Adrián Martínez, destacando su vertiente solidaria. (Informa: Bartomeu Roig). Y no hay que olvidar a los 1.100 deportistas de la Vall d’Uixó, con triunfos de Fernando Martínez y Júlia Font. (Informa: Emma Sanz).