El último en sumarse a la extensa lista de ausencias del Villarreal el pasado domingo ante el Barça fue Pablo Fornals. El castellonense sufrió en el entrenamiento previo a la visita del conjunto azulgrana un síncope vasovagal que le impidió ser de la partida, aunque el futbolista asegura que su intención era la de jugar.

«Quería estar como fuera ante el Barcelona, pero no me dejaron. El desmayo ya me había pasado en Málaga, pero, por el desconocimiento y por la pronta recuperación que le sucedía, seguía jugando sin problemas. Ha tenido que pasarme aquí para tomar consciencia de lo que sucede», explicó. Fornals añadió que a día de hoy se encuentra bien y que no tendrá mayor problema en participar con el equipo amarillo en el partido ante el Celta.

«Los médicos me han dado unas pautas para que las siga y que no me pase otra vez», afirmó el jugador, quien dijo que su próximo rival, el Celta, «tiene un buen equipo pese a las bajas».

Fornals incidió en que el Villarreal atraviesa un buen momento de juego, pero que deben de cerrar los partidos mejor, ya que «la mayoría se han escapado en esa recta final y por pequeños detalles», en referencia a los últimos cuatro encuentros ligueros en los que han encajado siete goles en los 20 minutos finales de juego.

«Ahora llegan dos partidos difíciles y queremos reaccionar y sumar en ambos choques. Nos está costando ganar, pero los rivales también juegan, tenemos que aprender de los errores y cerrar los partidos mejor», opinó el jugador, quien se enfrentará en las siguientes jornadas a Celta y Valencia. Fornals también admitió que la tabla está «bonita e igualada», y aseguró que no pueden dormirse y que «cada partido es importante para mantener la plaza y aspirar a algo más».