El Girona, próximo rival del Villarreal en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, se queda sin ocupar uno de los puestos que permitirán la lucha por el ascenso a Primera División tras caer ante el Tenerife (1-0).

Los catalanes necesitaban los puntos para reincorporarse al cuarteto de play-off y el Tenerife para salir del descenso, de ahí que ni uno ni otro escatimara esfuerzo alguno para encauzar cuanto antes sus respectivas intenciones. De esta manera, cuando el cuadro gerundense parecía un poco más entonado y tener controlado a su rival llegó el tanto blanquiazul en el minuto seis, un robo de balón de Dani Gómez en el centro le permitió asistir a Nahuel para que el atacante, por la izquierda, se fuese por velocidad y batiese a Riesgo con un tiro cruzado.

Esta ventaja local no trastocó ni el pensamiento ni el esbozo táctico gerundense, puesto que el balón continuó mayoritariamente en su poder, disponiendo en el minuto 19 de una buena ocasión para igualar, pero Alberto frustró la tentativa al interponerse en un franco disparo de Stuani.

En la segunda mitad, los numerosos y reiterados asedios del Girona sobre el área tinerfeña tampoco fructificaron de la manera deseada, unas veces por su propio infortunio y otras por la obstrucción de los zagueros locales. Al final, una derrota que devuelve las dudas, ya que es la cuarta en los últimos cinco partidos.