Con el número 17 se presenta Antoine Griezmann en el Barça. Con el 17 que lució efímeramente Jeison Murillo (solo cuatro partidos) en el último semestre, sin poder vestir el dorsal que le gustaría al tercer fichaje más caro de la historia. Los cinco primeros llevan la firma del mismo presidente: Josep Maria Bartomeu, que reconoció haber pedido un crédito de 35 millones para sufragar el último.

«El 7 ya tenía nombre y por votación en la familia hemos elegido ese», aseguró el futbolista, consciente de que la camiseta pertenece a Coutinho, «intransferible» para la directiva del Barça. De momento. A falta de 48 días para que se cierre el mercado, y con la presencia de Neymar revoloteando para volver.

«Agradezco que me hayan dado otra oportunidad», aseguró Griezmann cuando empezó a dar las gracias por su fichaje, que ha costado 120 millones de euros, La lista empezó con «el presi Aperribay», en alusion al presidente de la Real Sociedad que le firmó el primer contrato profesional.

EL VÍDEO / Esa oportunidad ha llegado tras la negativa del verano pasado, comunicada por Griezmann en un vídeo que era un publireportaje de su figura y editado por uan productora de Piqué. El barcelonismo y su directiva, empezando por Bartomeu, se enteraron del «no» de La Decisión, en el momento de la emisión.

«He hecho cosas malas, pocas, en mi pasado, pero nunca me he arrepentido poque era algo que quería hacer en ese momento. Si hay que pedir perdón a alguien será en el campo, que es donde mejor hablo», expuso. El futbolista afirmó que el último verano no se sentía preparado para recalar en el Barça. «A la familia no le venía bien y a mi me faltaba algo por hacer en el Atlético», dijo.

Leo Messi y Luis Suárez le esperaban con los brazos abiertos y se llevaron un chasco. El uruguayo le apadrinaba por la estrecha relación de Griezmann con Diego Godín. «Puede ser que estén dolidos, pero con asistencias podemos arreglarlo todo», dijo con humor el delantero, que ahora «podrá sentarse en la misma mesa que Messi: De forma real, en los desayunos y las concentraciones azulgranas, y no solo de forma figuraba, cuando se creyó -y lo confesó- al mismo nivel que Messi y Cristiano.

Ahora tiene el convencimiento de que no. De que él está en un estrato inferior. «Lo que me hace más feliz es poder compartir el mate con él, con Messi. Va a ser una leyenda para mi hijo y los hijos de mi hijo. En el basket está LeBron James y en el fútbol está Messi», explicó el futbolista, gran y confeso aficionado a la NBA.

Por último, Bartomeu explicó la polémica del precio. «He hablado con el Atlético pero no creo que tengan pruebas de nada, Conctactamos con el jugador y su entorno en mayo», garatinzó, que se apoyará en un crédito de 35 millones a pagar en seis meses. Los 83 restantes para los 120 de la cláusula salen de facturas pendientes de cobro de otros clubs.