La selección española femenina de waterpolo no ha podido culminar su excelente Mundial en Budapest al tropezar en la final con la ultrapotente Estados Unidos, que ha ganado su quinto título universal al imponerse a las 'guerreras' de Miki Oca por un contundente 13-6, con parciales de 2-1, 3-2, 5-2 y 3-1. Las norteamericanas, también dobles campeones olímpicas (2012 y 2016) han dado un auténtico recital de contundencia en defensa y efectividad en ataque para dejar a España con la medalla de plata, que de todas maneras es su primer podio en los últimos tres años. EEUU, de paso, se ha vengado de la derrota en Barcelona 2013, donde España ganó su único título mundial.

Tras un inicio de partido muy igualado (5-3 en el descanso), España se ha visto superada totalmente en el tercer cuarto, con un parcial de 4-0 en cuatro minutos que ha hundido cualquier esperanza española. EEUU ha aprovechado de forma inmejorable sus ataques en superioridad, transformando 10 goles en 13 oportunidades, por solo 3 de 6 de España. Los goles de Anni Espar (3), Bea Ortiz (2) y Paula Leitón (1) no han bastado ni para acercarse a EEUU, que ha confirmado su dominio en el waterpolo femenino al conquistar su quinto título mundial, tras los del 2003, 2007, 2009 y 2015.

El combinado de Adam Krikorian no pierde un partido importante desde los cuartos de final del Mundial de Barcelona 2013, en que sucumbió ante España por 9-6. Desde entonces, EEUU solo ha perdido una vez, en la primera fase del Mundial del 2015 ante Italia, lo que provocó que se volviera a cruzar con España en los octavos de final.

Por lo que respecta a España, siempre ha tropezado con EEUU, a excepción del Mundial del 2013. No en vano fue su verdugo en la final olímpica de Londres 2012 (8-5), en el Mundial del 2015 y en los Juegos de Río 2016 (11-4 en la primera fase), ganados también por las norteamericanas. En este Mundial de Budapest ambas selecciones también coincidieron en la primera fase, con un 12-8 para las estadounidenses, que tienen en sus filas a viejas conocidas como Melissa Seidemann y Kiley Neushul (ambas han jugado en el Sabadell, núcleo de la selección española), si bien en esta ocasión no han tenido a su gran portera, Ashleigh Johnson.

La selección española, por su parte, ha regresado al podio después de tres años de sequía, y eso a pesar de un grupo muy renovado en el que solo continúan cinco jugadoras del equipo campeón mundial en Barcelona 2013 y en el que han debutado cuatro. En el primer grupo están Laura Ester, Marta Bach, Anni Espar, Mati Ortiz y la madrileña Pili Peña, la única no catalana del equipo. En el grupo de debutantes en un gran campeonato figuran la portera Sandra Domene (17 años), la boya Paula Crespí (19), la goleadora que juega en Italia Anna Gual (21) y la zurda Helena Lloret (25).

Pese a su derrota de este viernes, el combinado de Miki Oca ha demostrado haberse sobrepuesto perfectamente a las sucesivas bajas de Jennifer Pareja (retirada tras no ser seleccionada para Río), Maica García (que se ha tomado un sabático tras 10 veranos sin descansar), Roser Tarragó (actualmente en EEUU) y la retirada Laura López.