La visita del próximo domingo a La Catedral será únicamente el primer tramo de un maratón de encuentros que pondrá a prueba el fondo de armario que tiene el Villarreal. Hasta el siguiente parón, el de las Navidades, el equipo amarillo tendrá que poner en liza absolutamente todos sus recursos para intentar saldar con éxito cuatro partidos de Liga --con la visita del Atlético de Madrid al Madrigal incluida--, dos de Europa League --salida Zúrich y Steaua en casa-- en los que se decide el futuro del Villarreal en el torneo continental y otros dos de la última competición que entra en escena, la Copa del Rey.

Fran Escribá tendrá que acentuar las rotaciones y dosificar los esfuerzos convenientemente para que el aluvión de partidos oficiales no pase factura en el plano físico. En los 30 días exactos que separarán el choque ante el Athletic Club de la 12ª jornada de Liga y la vuelta de los dieciseisavos de final del torneo del KO, ante el CD Toledo, el conjunto amarillo disputará un total de nueve encuentros; es decir, que saldrá a una media de un partido cada tres o cuatro días, un peaje que deben pagar los equipos que, como el Submarino, están inmersos en las competiciones europeas.

CASI PLENO DE EFECTIVOS / La buena noticia para Escribá es que el maratón llega en el mejor momento posible. Hoy por hoy, tan solo el delantero Roberto Soldado --tendrá que esperar hasta el 2017-- ocupa la enfermería, después de que se hayan ido recuperando durante los últimos días los jugadores que llegaron al actual parón con alguna molestia. Daniele Bonera y Samu Castillejo empezaron a trabajar con el grupo a finales de la pasada semana y los partidos internacionales --a falta de los compromisos que se disputarán entre hoy y mañana- parece que han respetado a los futbolistas del Villarreal.

Hasta la fecha, Escribá ha ido repartiendo protagonismo en las dos competiciones en las que está inmerso el Submarino. Solo el capitán, Bruno, se ha saltado asiduamente las rotaciones y ha sido fijo tanto en la Liga como en la Europa League. Ahora, con la Copa, habrá que dar una vuelta de tuerca más y los jugadores con menos minutos en las piernas deberán dar un paso al frente.

Hombres como Rodrigo, Cheryshev --perjudicado en su regreso al club por los problemas físicos--, Álvaro, Rukavina, José Ángel, Borré… podrán ver incrementada su cuota de participación en un equipo que quiere pasar unas Navidades tranquilas, instalado entre los cuatro primeros de la Liga y con los billetes para los dieciseisavos de final de la Europa League y de los octavos de la Copa del Rey en el bolsillo. H