Tres meses y 24 días habrán pasado este domingo desde el último partido del Villarreal en el Estadio de la Cerámica. El conjunto amarillo empató ante el Deportivo en la penúltima jornada de la pasada Liga en un partido disputado el 14 de mayo. Este domingo, a partir de las 20.45 horas, regresa el fútbol, con la visita del Betis y pese a lo que diga la clasificación, la afición tiene toda la ilusión intacta por volver a disfrutar con su equipo y, a poder ser, con una victoria. Mediterráneo testó el ánimo entre la parroquia amarilla, que tiene muchas esperanzas puestas en ver el rendimiento de los fichajes, así como la última transformación a la que se ha sometido el campo.
El presidente de la Agrupación de Peñas, José Luis Alcón, reconoció por ejemplo que la afición «tiene ganas de volver al campo a ayudar al equipo, ahora que más lo necesita», y en la misma línea se mostraba el presidente de Marea Groga, Juanjo Ferrer: «Envidio a campos como San Mamés, donde la grada anima a su equipo incondicionalmente, y al final de la primera parte y del partido ya critican algo si entienden que deben hacerlo». Menos cariño profesan los preguntados por este diario al entrenador Fran Escribá, que estará deseando como el que más cambiar la dinámica negativa del Villarreal para recuperar la confianza de la grada.
