Simón Moreno, de nuevo en las filas del Villarreal B, explica los escalofríos que ha sufrido este verano en Almería y Málaga, ninguneado por sus respectivos jeques, que no permitieron que cuajase ninguna de las dos cesiones, de ahí que haya vuelto a su casa: «He aprendido lo que es estar fuera del Villarreal. Que aquí se está muy bien y que fuera hace frío. Esto me dará más fuerza para seguir hacia adelante».

«El propietario del Almería no admitía cedidos sin opción de compra. Llegamos a un acuerdo para rescindir la cesión y luego aposté por el Málaga», explicó sobre el principio de su rocambolesca historia. «Salió mal también. Llegué incluso a entrenar con ellos y me dijeron que podría ir convocado para el partido contra el Girona. Llegó la convocatoria y no estaba en la lista. Luego entrené con los descartes y, el lunes, me dijeron que habían roto las negociaciones con el Villarreal. No puedo expresar bien lo que siento: parece que alguien la ha tomado conmigo», comentó sobre su paso por el Málaga.

A ‘CUADROS’ // «Me quedé un poco a cuadros cuando me pasó por segunda vez. Buscamos una solución y aunque tenía ofertas, lo mejor fue volver al Villarreal: si el destino quiere que esté aquí, es porque el Villarreal es mi casa», ahondó el onubense. «Aún tengo menos de 23 años y estoy contento de estar en el filial », recalcó. «No he podido estar en dos equipos por varias circunstancias, pero ahora solamente quiero estar en el Villarreal B, que es mi equipo», comentó el delantero, autor de 13 goles durante el pasado ejercicio liguero.

Simón confía en volver a enfundarse la camiseta del filial mañana, en el Mini Estadi, ante el Orihuela (19.00 horas): «Estoy muy contento. El cuerpo técnico y mis compañeros me han acogido muy bien. Quiero debutar contra el Orihuela, si Dios quiere. Llevo aquí desde el infantil A y mi ilusión es debutar en Primera División vestido de amarillo», desgranó el atacante de Cartaya.