No es casualidad, no, que el paddock del Mundial de MotoGP viva atónito el arranque fulgurante de Marc Márquez a lomos de su Honda RC213V que, en el primer test de pretemporada, en Sepang(Malasia), estaba a un segundo y medio de Jorge Lorenzo (Yamaha). No es casualidad que los que más saben de esto afirmen que, junto al trabajo desesperado de los cien ingenieros del departamento de competición de la firma alada (HRC), la sabiduría de Santi Hernández, técnico de Márquez, y el extraordinario trabajo de todos los mecánicos y técnicos del equipo Repsol-Honda, las manos, el valor, el arrojo y, sobre todo, la mentalidad del tetracampeón de Cervera (Lleida), haya hecho que solo su Honda sea capaz de codearse y ganar a motos mejores que la suya, como son la Yamaha de los campeones y la impresionante Ducati Desmosedici.

Márquez acabó en el podio de Catar (3º) y la segunda Honda fue la de Dani Pedrosa (5º) ¡a 12 segundos de Marc! Márquez ganó en Termas de Río Hondo (Argentina) y la segunda Honda fue también la de Pedrosa (3º) ¡a 28 segundos de Marc! Y Márquez triunfó en Austin (Tejas, EEUU) y la segunda Honda fue la del catalán Tito Rabat (13º) ¡a 47 segundos de Marc! Es evidente que Shuhei Nakamoto y Livio Suppo, jefes del team Repsol-Honda, tienen un problema, y grave, si no logran retener, y pronto, a Márquez.

De ahí que, nada más concluir el warm-up de Austin, el ensayo previo a la carrera, Suppo se abalanzase sobre el micrófono de Movistar TV e informara de que había empezado ya las negociaciones con Emilio Alzamora, manager del bicampeón de MotoGP más joven de la historia, para renovar su contrato.

"Si no tuviera a Márquez, Honda no ganaría una carrera", afirma con contundencia el italiano Carlo Pernat, descubridor de Valentino Rossi y actual manager de Andrea Iannone. "Solo Márquez es capaz de hacer funcionar esta Honda". Es evidente que hasta que no ha tenido una buena moto o hasta que sus ingenieros no han ayudado a Hernández a reconstruirla en la buena dirección, Honda no se ha atrevido a llamar a la puerta de Alzamora, cuya intención, como la de su pupilo, es seguir en Honda. Eso sí, con un contrato parecido al que Ducati y Marlboro le han ofrecido a Lorenzo: 12 millones de euros por temporada.

Lo que se suponía iba a ser la movida del año puede cerrarse en pocas semanas. El hecho de que los cuatro magníficos y medio, Maverick Viñales (Suzuki), concluyan sus contratos esta temporada, parecía el punto más desestabilizador del campeonato. Y parece que pronto quedará todo resuelto. Valentino Rossi fue el primer en renovar por Yamaha hasta finales del 2018. Pronto Lorenzo anunciará que se irá el año que viene a Ducati. El siguiente puede que sea Márquez comunicando que sigue en Honda. E, incluso, al mismo tiempo que Dani Pedrosa, a quien su extécnico, Mike Leitner, quisiera tener en KTM la próxima temporada cuando la firma austriaca debute en MotoGP. Y, al final, hasta Viñales anunciará que deja Suzuki para ocupar el puesto de Lorenzo en Yamaha.

HONDA Y RESPOL, JUNTOS

Honda sabe que ha de ofrecerle a Márquez el dinero que pida. No tiene otra opción. Los resultados hablan por sí solos. Además, Repsol, su patrocinador y socio desde 1995, vería con muy buenos ojos que la pareja española renovase por dos o tres años. Es más, la petrolera española, pese al derrumbe del barril de petróleo, va a mantener firme su apuesta en el Mundial de la categoría reina y podría negociar la renovación con Honda por los mismos años que renueven Márquez y Pedrosa, ya que su actual acuerdo con la fábrica japonesa concluye a finales del 2017. Así las cosas, todo parece indicar que solo el team Repsol-Honda será la única estructura en repetir formación en el 2017. H