Isidoro Hornillos, aspirante a suceder en la presidencia de la Federación Española de Atletismo a José María Odriozola, ha explicado hoy en Zaragoza su programa en el que destaca la propuesta de que los atletas que hayan sido sancionados por dopaje no puedan vestir la camiseta de la selección española.

"No es una doble sanción, es un propuesta para proteger a la selección española y para lanzar un mensaje a los atletas y al resto de países de que luchamos contra el dopaje", ha añadido.

En la presentación de su candidatura en la capital aragonesa, Hornillos, que ha explicado que ha ejercido todas las facetas del atletismo menos la de juez, ha querido mandar un mensaje de "optimismo" a la vez que ha destacado que se siente "preparado" para dirigir el atletismo español.

Igualmente ha señalado que es necesario "potenciar" las federaciones autonómicas, así como apostar por el factor humano y por los clubes porque cree que sin ellos "no se puede establecer un futuro alentador".

A este respecto ha explicado que había que hacer un "esfuerzo" por la tecnificación y que las federaciones autonómicas habían estado "muy discriminadas" en este aspecto, lo que las había "debilitado" porque no ha habido diálogo con ellas.

"No estoy en contra de los Centros de Alto Rendimiento pero eso no quiere decir que no pueda haber diversificación", ha apuntado, a la vez que ha recordado que ha habido grandes atletas en España que se han hecho fuera de Madrid y Barcelona como Peñalver, Fermín Cacho o, más recientemente, Ruth Beitia.

Isidoro Hornillos ha indicado también que los atletas nacionalizados deben tener los mismos derechos y las mismas obligaciones que los nacidos en el país pero que se debe poner un límite, algo que propondrá a la Federación Internacional de Atletismo.

También ha asegurado que, aunque no es partidario de poner un límite al número de legislaturas que pueda estar en el cargo el presidente de la federación, se compromete a no superar los dos mandatos.