La aportación del baloncesto español estuvo presente una jornada más en la competición de los playoffs de la NBA con el ala-pívot Serge Ibaka, que brilló en su juego individual y de equipo, mientras que el base José Manuel Calderón completó el mejor partido en lo que va de la fase final.

Ibaka volvió a mostrar su gran poder físico y se convirtió en factor clave del quinto partido de la eliminatoria de primera ronda de playoffs de la Conferencia Este que los Raptors de Toronto ganaron por 118-93 a los Bucks de Milwaukee.

El ala-pívot hispano congoleño volvió a ser el titular indiscutible que tuvo todo el protagonismo en el juego interior de los Raptors.

Ibaka aportó 19 puntos en los 25 minutos que estuvo en la pista del Air Canada Centre de Toronto, al anotar 8 de 10 tiros de campo, con un triple de tres intentos, y acertó 2-2 desde la línea de personal.

Además de capturar seis rebotes defensivos, repartió tres asistencias, recuperó un balón, perdió dos y puso tres tapones que le convirtieron en el mejor del equipo en esa faceta del juego.

Calderón, a sus 35 años, ha vuelto a disfrutar de los playoffs después que los Hawks de Atlanta le sacaran de la lista de los descartables de Los Angeles Lakers y completó su mejor actuación individual en el cuarto partido de la eliminatoria que su equipo ganó por 111-101 a los Wizards de Washington.

El veterano base extremeño fue decisivo como reserva en el ataque de los Hawks al aportar 10 puntos y protagonizar acciones claves en la recta final del partido.

Calderón, que jugó 20 minutos, a pesar de tener problemas con las personales, cometió tres en el primer cuarto, completó el mejor partido de playoffs con los Hawks al ser clave en la dirección del ataque cuando estuvo en la pista del Philips Arena de Atlanta.

El base de Villanueva de la Serena anotó 4 de 9 tiros de campo, incluidos 2 de 5 triples, sin que fuese a la línea de personal.

El internacional español repartió cinco asistencias -el tercero mejor del equipo esa faceta del juego-, además de capturar dos rebotes y perder un balón.

Calderón protagonizó la jugada decisiva en el cuarto periodo, cuando los Hawks comenzaron a distanciarse en el marcador después de que el base español dirigiese un saque rápido con pase al escolta Tim Hardaway Jr. que hizo un tiro en suspensión.

El balón no entró a canasta, pero allí estuvo la mano de Calderón para tocarlo y conseguir que los dos puntos subiesen al marcador y pusiesen un parcial de 89-81 que sería el decisivo, mientras que el jugador español lo celebraba por todo lo alto mientras regresaba a defender.