El Villarreal se dispone a vivir con tensión las últimas horas del mercado estival de fichajes, que cierra definitivamente esta medianoche, coincidiendo prácticamente con el pitido final del encuentro que medirá en el Estadio de la Cerámica al conjunto amarillo con el Girona. A pesar de que Calleja daba ayer «prácticamente cerrado» el capítulo de incorporaciones y de salidas, dejaba abierta la incertidumbre. «Puede pasar cualquier cosa», apuntaba el técnico, consciente de que en las oficinas de la Ciudad Deportiva se sigue trabajando hasta última hora tanto en la llegada de más refuerzos como en la posibilidad de que alguno de los jugadores con contrato en vigor pudiera abandonar el Submarino por la aparición de ofertas tentadoras para ambas partes.
En lo que respecta a los fichajes, el Villarreal njo ha cerrado la puerta a la posibilidad de fortalecer el centro del campo. A pesar de que parece que la recuperación de Bruno va por buen camino, el club no vería con malos ojos dotar de más músculo a la medular. El Villarreal estaría trabajando en la incorporación de un mediocentro de corte físico y el principal candidato sería el centrocampista del Leicester City Vicente Iborra, que cumple con todos los parámetros que exige el Submarino, incluido el de su amplia experiencia en la Liga de nueve temporadas, entre sus etapas en el Levante y el Sevilla, el club que abandonó la pasada campaña para irse a la Premier.
Iborra, de 30 años y 1.90 de estatura, no ha entrado en estos inicios de temporada en los planes del técnico del Leicester, Puel, con el que solo jugó 10 minutos en el estreno con derrota ante el Manchester United (10 de agosto). Iborra solo fue titular ante el modesto Fleetwood Town de Tercera, hace tres días en la Copa de la Liga (marcó un gol).
EL PRINCIPAL OBSTÁCULO / El caballo de batalla para que la operación se lleve a cabo está en la modalidad del pase al club amarillo. El Villarreal quiere que el jugador recale esta temporada en la plantilla de Calleja en calidad de cedido, mientras que el Leicester es partidario de un traspaso.
El otro frente abierto a horas para que concluya el plazo de incorporaciones en la mayoría de las ligas europeas se centra en la posible salida de Víctor Ruiz. El Zenit ha apostado fuerte para contar esta temporada con el central catalán, que finaliza contrato el 30 de junio del próximo año con la entidad amarilla, y ha presentado una oferta superior a los 10 millones de euros en su primera toma de contacto con el Villarreal, cantidad que el club que preside Fernando Roig considera insuficiente, sobre todo porque la salida del defensa de 29 años obligaría a acometer una incorporación para cubrir su hueco.
El Villarreal espera una contraoferta del Zenit para un posible acuerdo que pondría fin a una etapa de tres temporadas de Víctor Ruiz en el club amarillo.
