Betxí ya está volcado con la 28ª edición de la Transbetxí, que arrancó a medianoche con la disputa del prólogo, valedero tanto para el desenlace final de este peculiar rally de motocultores como para el Red Bull Motorets, prueba paralela celebrada la pasada madrugada y que contó, como principal reclamo, con el piloto dakariano Joan Barreda.

Con todo, la Transbetxí vivirá, a lo largo de todo el día de hoy, su momento más álgido, con la disputa de los cinco tramos cronometrados, dos matinales y tres vespertinos. A las 10.30 horas, el TC1 (Sénia Sagrat Cor-Rodaor); y a las 11.30, el TC2 (Rodaor-La Murtera). Después, con inicios a las 16.30, las 17.30 y las 18.30 horas, el TC3 (Camí Les Forques-La Mina), el TC4 (Muntanyeta de Sant Antonio) y el TC5 (Camí de Montserrat). Ya por la noche, la publicación de los resultados oficiales y la entrega de premios.

Betxí, que cuenta con una población ligeramente inferior a los 6.000 habitantes, ya era un hervidero ayer. La organización confiaba en que alrededor de 7.000 espectadores ya presenciara la doble competición de anoche, una cifra que podría, incluso, doblarse a lo largo de este sábado. Todo ello gracias al impulso del Ayuntamiento de Betxí, organizador de la prueba con el inestimable apoyo de la Associació Fora d’Hores, que, durante los últimos días, ha mimado y repasado todos los caminos por los que transcurre la prueba. Unos tramos con una longitud media de cuatro kilómetros que los 55 equipos participantes cubrirán con velocidades medias cercanas, sino superiores, a los 60 km/h.

El mayor ejemplo de la creciente difusión e internacionalización es que los inscritos ya no solo proceden de Betxí y la provincia. Este año destaca la presencia de hasta siete conjuntos alemanes. Todos ellos tratarán de acabar con el reinado José Vedrí, vencedor de las últimas cuatro ediciones. H