El Kashima Gakuen lleva 18 años visitando al Villarreal CF por su manera de trabajar con el fútbol base. Un modelo a seguir en todas las partes del mundo. El Kashima Gakuen es el equipo juvenil de la Kashima Academy de Japón y estuvo toda la semana entrenando y jugando en las instalaciones deportivas del Villarreal. Y no es la primera vez. Hasta 18 años seguidos llevan viajando desde Japón para empaparse de la metodología de trabajo que se realiza en la cantera grogueta.

Los jóvenes jugadores tienen edad juvenil y están becados, la mayoría, dentro del programa del instituto japonés. Los más de 30 prometedores futbolistas que aterrizan en España viven una experiencia inolvidable. La semana resultó especial, ya que además de los entrenamientos y partidos, recibieron la visita sorpresa de Marcos Senna. El exjugador del Submarino compartió con ellos una sesión en un ambiente magnífico.

El entrenador del equipo juvenil es Masato Suzuki, un fiel seguidor del Villarreal desde la lejanía. El técnico explica los motivos de la colaboración: «Sabíamos que el Villarreal estaba buscando una mejora y evolución con una metodología distinta y nosotros quisimos participar. Nosotros somos un equipo de un instituto de la provincia de Ibaraki en Japón. Dentro de la provincia somos uno de los mejores equipos, pero no queremos conformarnos con eso y el Villarreal nos está ayudando con su metodología en nuestro crecimiento. Sobre todo, buscamos un aprendizaje continuo tanto de los entrenadores como de los jugadores, ya que es la clave para crecer como equipo».

Para Masato Suzuki, salir de la zona de confort es clave en el crecimiento en todos los aspectos: «Hay tantas cosas que no puedes saber si no sales de Japón. Te das cuenta de que tu estándar no es el estándar mundial y gracias a que llevamos 18 años visitando al Villarreal me di cuenta de que tengo que aprender constantemente. A mis jugadores les he aconsejado que se empapen del conjunto amarillo y la verdad es que así lo están haciendo. Les veo con mucha predisposición».

La pasión por el Villarreal no sabe de fronteras. De hecho, el técnico reconoce que el club amarillo está muy bien considerado en Japón: «Vila-real como ciudad no es muy grande, pero hay una afición incondicional y es muy querido por el pueblo. Es admirable. A mí, personalmente, me encanta Cazorla. Es muy técnico, solo le conozco como jugador, pero creo que es una muy buena persona porque lo demuestra con su comportamiento en el campo».