Solo ha necesitado tres años como profesional para ganar la Orden del Mérito Europeo, bautizada ahora como Race to Dubai, el título que reconoce al número uno de la temporada. La carrera de Jon Rahm sigue disparada hacia la cima, sin que atisbe un techo próximo a este jugador vasco de 25 años, y su triunfo este domingo en el Jumeirah Golf States de Dubai, la última prueba de la temporada, después de un apasionante duelo con el inglés Tommy Fletwood, lo demuestra.

Desde la posición de colíder en la que inició la jornada final, Rahm resistió la presión del jugador inglés (acabó un golpe por detrás), también la de su compañero de partida, el francés Mike Lorenzo-Vera (acabó a 2), compitió con inteligencia para completar una tarjeta de 68 golpes, 19 bajo par, y hacerse con el triunfo en el DP Tour Championship como lo hacen los grandes campeones: con un birdie en el último hoyo que le evitó ir al desempate.

Ha sido muy duro, muy exigente. Es increíble lo que he conseguido, aseguró Rahm, nada más concluir. Cuando he llegado al último hoyo, he pensado: ¿Cuántas veces has soñado con ganar un torneo con un birdie en el último hoyo? Eso me ha empujado, añadió.

Tercero del mundo

Con su victoria, Rahm se alzó también con el número uno europeo se colocará el tercero del ránking mundial y cerrará así una campaña memorable. El golfista vasco se embolsará tres millones de euros por la victoria en Dubai, el mayor premio en un torneo de golf mundial, y dos millones más por su primer puesto en el ranking europeo.

Solo Severiano Ballesteros había conseguido ese título antes, hasta en seis ocasiones, la última en 1991, hace 26 años. Es increíble por lo que representa. Seve era un ídolo para todos nosotros y poner su nombre ahí detrás del suyo, cuando el golf español ha tenido siempre grandes nombres como Olazábal o Sergio García, un jugador que puede conseguirlo también, es alucinante, explicó Rahm, en quien muchos aprecian el carisma, el atrevimiento y el talento del desaparecido Seve.