El vinarocense Jordi Pablo, jugador del Villarreal --también representado en la cita con los guardametas Yelco y Diego Marino, ambos suplentes del titular De Gea--, fue uno de los artífices de que España estuviera en semifinales, ya que marcó ante Francia el empate a uno --luego, el combinado dirigido por Juan Santisteban obtuvo el billete a la penúltima ronda en la tanda de penaltis--. Un esguince de tobillo le impidió jugar frente a Ghana, aunque todavía dispone de tres días por delante para restablecerse de la dolencia y participar el domingo en la final, que España dirimirá a partir de las 19.00 horas (mediodía en España) frente al vencedor del Nigeria-Alemania de hoy (también a la misma hora).