El Benicarló, con cinco juveniles en su convocatoria, logró una victoria épica contra el Benicasim, en un partido atípico y disputado y al que no le faltó emoción. Sin embargo, las ocasiones claras de gol brillaron por su ausencia.

En la primera parte, muy nivelada, lo más destacado fue la expulsión, en el minuto 37, de Mati, que soltó el brazo en un rifirrafe con Manu y vio la tarjeta roja.

En la segunda parte, a pesar de jugar con un hombre menos, los de Javi Celma mejoraron su rendimiento y pasaron a controlar el juego ante un Benicasim muy inocente en los metros finales.

El gol de la victoria rojilla llegó cuando aún no se había cumplido un cuarto de hora de la reanudación. El juvenil Carlos González -el mejor de su equipo- recogió un rechace defectuoso con la cabeza del portero Elvis, que había salido fuera de su área, y terminó rematando a puerta vacía desde casi cuarenta metros.

Faltando un cuarto de hora para la finalización del encuentro, el conjunto visitante también se quedó con diez efectivos, debido a la expulsión de Carlos Bou, tras protestar de forma airada una decisión del colegiado del duelo Ribes Barreda. H