Jürgen Klopp y el Liverpool tienen al Villarreal en mente y ayer lo pagaron en su envite liguero a cuatro días del desenlace de la eliminatoria. Los reds desaprovecharon ante el Swansea una de las últimas balas que le quedaban para alcanzar una plaza europea en la Premier League. Y lo hicieron porque los de Anfield aterrizaron en el Liberty Stadium con un equipo de circunstancias y con la vuelta de la Europa League como única preocupación en el horizonte y el conjunto galés supo aprovecharlo para imponerse por 3-1.

El alemán rotó en demasía para dar descanso a sus hombres más importantes. Futbolistas capitales en el esquema de los reds como Milner, Firmino, Touré o Alberto Moreno se quedaron fuera del once cediendo su lugar a numerosos canteranos, entre ellos el valenciano Chirivella.

Con la alineación demostraba el preparador teutón que el choque parecía más una distracción que una última oportunidad para asaltar puestos europeos y ese notorio desinterés no tardó en trasladarse al marcador.

Corría el minuto 20 cuando Ayew aprovechó la pasividad de la defensa del Liverpool para cabecear al fondo de la red defendida por el joven Ward y solo seis minutos después Cork ponía tierra de por medio con un gran disparo desde fuera del área.

COUTINHO, AUSENTE // El Liverpool ya iba dos abajo y, al igual que en El Madrigal, Klopp aprovechó el descanso para dejar en la caseta a uno de sus futbolistas más cotizados, Coutinho, pensando más en el choque ante el Villarreal que en una posible remontada que solo saboreó tres minutos.

Y es que en el 64 Benteke recortaba distancias pero en la siguiente jugada ofensiva local Ayew firmaba su doblete. La derrota deja al Liverpool húerfano en la Premier y con la Europa League como única vía para jugar en Europa la próxima campaña. H