Simón Moreno fue operado de la rodilla derecha el pasado miércoles y ya cuenta los días que le faltan para poder volver a vestirse de corto. Como mínimo estará seis meses de baja, ya que sufrió la rotura completa del ligamento cruzado de su rodilla derecha en el encuentro disputado recientemente en el Mini Estadi contra el Valencia Mestalla.

«Estoy bien, con ganas de afrontar esta situación con positivismo y de recuperarme lo antes posible», asegura el delantero del filial amarillo, quien no duda en añadir: «La vida me pone obstáculos y los quiero superar». Esos obstáculos han sido, en el último año, de todo tipo, ya que además de la grave lesión que ha sufrido, el pasado verano pudo haber dado un salto de calidad habiendo recalado en el Almería o el Málaga, pero ambas operaciones se frustraron en el último momento y Simón Moreno regresó a la entidad de la Plana Baixa. «Ya dije, en la rueda de prensa cuando regresé al Villarreal, que todo esto pasa por algo», comenta el atacante andaluz. Entre risas, Simón destaca: «Como me dijo mi padre este verano, al final de mi carrera podré escribir un libro con todo lo que me ha sucedido».

GRAVE LESIÓN / El joven futbolista recuerda cómo ocurrió el percance: «Estaba parado en el área y Javi Jiménez, excompañero mío en la selección, chocó conmigo y nos golpeamos en el hombro. La rodilla me crujió dos veces y me dolió mucho. Sabía que algo grave me había pasado, porque excompañeros que han sufrido esas lesiones, me explicaron las sensaciones que tienes cuando sufres una lesión de rodilla».

Pese a todo, Simón Moreno está tranquilo, porque sabe que está en buenas manos, las de los médicos, fisios y readaptadores del Villarreal, «que son muy buenos» y, además, «amigos». Con ellos hará la rehabilitación.