El partido entre el Levante y el Leganés fue un encuentro de tensión. Acabó con tres expulsados y gritos entre los jugadores. Desde la sala de prensa del estadio valencianista podía escucharse intentos de mantener alejados a ambos conjuntos. "Cada uno a su vestuario", decía alguien.

Sin embargo, esto no pudo evitar la trifulca entre el delantero del Leganés, Nordin Amrabat y un médico del Levante. Una vez concluido el partido, el jugador, que fue expulsado en el minuto 68 por doble amonestación, agredió al médico granota en el túnel de vestuarios y solo la policía pudo pararlo.

El agredido ha asegurado que va a denunciar al delantero del Levante, que durante la jornada de este miércoles recibirá el informe policial sobre la intervención de las fuerzas de seguridad. Con ello, puede que tenga consecuencias judiciales. Pero no ante la Federación, pues el acta del partido, redactada por el colegiado Jaime Latre, no recoge lo acontecido en los túneles de vestuarios.

Los entrenadores, al margen

Posteriormente, en rueda de prensa, el entrenador del Leganés, Asier Gaditano aseguró que no sabía lo que había sucedido pero que quizás era consecuencia de toda la tensión vivida en el campo. Por su parte, Juan Ramón López Muñiz, entrenador del Levante, también indicó que no se había enterado de la trifulca pero que creía que a los jugadores no les iba a pasar nada porque había visto gente de paisano.