La carrera de fondo entre el Liverpool y el Manchester City sigue sin tregua. Si los de Guardiola arrollaban el sábado el Everton, los de Klopp aplastaron al Manchester United este domingo (3-1) con un vendaval ofensivo como pocos en el fútbol europeo. Esta vez decidieron los dos goles de Shaqiri en el tramo final, que aferra al equipo de Jürgen Klopp al liderato de la Premier League.

Un United acorazado aguantó casi 80 minutos, pero Anfield fue demasiado para el planteamiento ultradefensivo de Mourinho. El Liverpool salió con una intensidad tremenda arrinconando el United, aunque con más llegada que precisión en el remate final. Once disparos y siete saques de esquina lanzaron los de Klopp en 45 minutos, generados muchos por un gran Fabinho, cada vez más cómodo en los esquemas ingleses. Fue el mismo brasileño quién asistió a Sadio Mané para transformar el esfuerzo en gol al minuto 24.

El United jugó a coraje y casta, desdibujado y tímido en ataque, pero sacando petróleo de la nada. Lingard empató antes del descanso aprovechando un mal rechace de Alisson. Mourinho firmaba el mismo guion para el segundo tiempo y, en verdad, casi lo consigue. Lo evitó la entrada del suizo nacido en Kosovo, Xherdan Shaqiri, que desbordó y definió sin complejos, aprovechando dos rebotes en los minutos 73 y 80 y rompiendo el partido.

El Liverpool alarga el mejor inicio ligero de su historia y hunde los 'red devils”' que se alejan a 11 puntos de las posiciones de Champions. La diferencia aumenta hasta los 19 puntos con los de Anfield, algo que no se veía en los últimos casi 30 años, desde 1990.