El Villarreal ha fichado un crack. No sé el rendimiento que dará a Marcelino, aunque sí sé que este trabajará al máximo para ponerlo otra vez en la galaxia. Es un jugador que fue top en Europa hace un lustro. Luego su estrella se difuminó. Pero solo tiene 26 años. Si recupera el hambre por ser un número 1, ha llegado al club perfecto para ello.

El Submarino tiene algo especial. Una cóctel que reúne la tranquilidad de su hábitat con un club en el que el fútbol es pasión, trabajo, sensatez e inteligencia en cuotas no definidas, pero mezcladas con vigor y fuerza. Y existe un presidente que exige. Como su entrenador. No olvidaré la capacidad de gestión de Negueroles. Ha firmado a un crack por solo 1,7 millones de euros por el 100% de sus derechos. No tengo una bola de cristal y no sé lo que le va a dar al Villarreal, pero Pato es un crack.

Y me viene a la cabeza una anécdota. Se la recordaba a Llaneza el martes, incluso el ordenador portátil con 300 teras de memoria que posee su cabeza, la había olvidado. Hace 6 ó 7 años, un compañero le preguntó al ahora vicepresidente a quién iba a fichar el club, en referencia a uno de los rumores sin sentido de dicho verano. José Manuel respondió con buen humor: A Pato. Era como decir ahora que el Villarreal iba a fichar a Messi, Neymar o Cristiano. Entonces era imposible, ayer llegó a Vila-real.

Este Villarreal posee el poso de continuar siendo un equipo con mayúsculas. Y con Pato, o con quien venga, seguirá siéndolo. Las prisas en el fútbol nunca son buenas más cuando debes administrar con cabeza los recursos de un club, como ha venido haciendo con inteligencia Negueroles. Dato objetivo. El único que tiene derecho a quejarse es Marcelino, porque debe afrontar una previa de la Liga de Campeones muy difícil. Y ha mantenido el tipo porque es hombre de club. H