El presidente del Villarreal CF fue el invitado de excepción en el arranque de la nueva temporada de la tertulia en clave amarilla de La Tribuna, en TVCS Mediterráneo. Fernando Roig hizo un repaso de la actualidad del club y del equipo, ahora en las manos de Fran Escribá, que ha conseguido superar los difíciles momentos del final de la pretemporada hasta asentarse en las primeras plazas de una Liga en la que se mantiene invicto después de las primeras siete jornadas. Precisamente, Roig se refirió al despido de Marcelino a mediados de agosto como una decisión «molesta e impopular», pero que era «necesaria» para el buen funcionamiento del primer equipo. «Cuando se crispa la situación y se crea un equipo paralelo, no es una buena experiencia. Había que reconducir la situación hacia un único Villarreal, que es lo que este presidente desea». «Todos los cambios que se han hecho en el Villarreal han sido para ir a mejor. La base es que el Villarreal es lo primero», recalca.

El Submarino no está en la Champions —«por algún fallo puntual, por las bajas...»— pero sigue teniendo presencia en Europa, «una situación que muchos otros equipos querrían». Roig también está convencido de que el equipo «está en buenas manos» con la llegada de Escribá, un técnico «exigente» que ha sabido normalizar la situación y tiene a sus órdenes una plantilla «capacitada para luchar en las tres competiciones». ¿La mejor de la historias del Villarreal? «Sí creo que más equilibrada. Es la filosofía: mejor que la de la temporada anterior, y peor que la de la próxima. Eso sí, siempre basándonos en el equilibrio económico e intentando ir subiendo a jugadores de la cantera», explica el máximo responsable de la entidad amarilla.

PRESUPUESTO DE 90 MILLONES // Ese equilibrio económico sigue siendo la gran obsesión de Roig, que cifra «entre 88 y 90 millones de euros» el presupuesto para el presente ejercicio, el necesario —«ni nos sobra ni hacemos corto»— para seguir manteniendo al Submarino entre los mejores del fútbol español y, por supuesto, mantener su fama entre los profesionales: «Aquí se cobra al día». «Hemos llegado a estar con presupuestos de 110, 115, 120 millones de euros. Llegó el momento en el que tuvimos que dar un golpe y aprovechamos el descenso para hacer las cosas bien. Vendimos jugadores y pusimos dinero. Y ahí estamos», explica Roig sobre la sostenibilidad actual del club, «capaz de autogestionarse y autofinanciarse».

LA DECEPCIÓN DEL MILAN // Fernando Roig también pasó en La Tribuna por el tema de la frustrada venta de Mateo Musacchio al Milan, «un jugador importante, que en un momento dado vienen a comprarlo, pero sin dinero». «No sé si en Italia es costumbre o no esa forma de actuar, pero aquí no se regala nada. Yo, si voy a Italia a comprar cerámica, sin dinero no me venden», explica gráficamente el presidente sobre el culebrón del verano. Pero ya es pasado. Ahora Roig se siente orgulloso de que el Villarreal vaya otra vez «por el camino correcto».