El CD Castellón se enfrentará a la UD Logroñés en la final de campeones en su camino hacia Segunda B. El partido, el sábado 18 en La Rosaleda de Málaga.

Posiblemente sea el campeón de grupo (en su caso del II) más versátil, el que se siente cómodo con o sin el balón en los pies. Un conjunto que se adapta muy bien a todas las situaciones que se le plantean en un partido porque cuenta en su plantel con muchos recursos. Cuenta en defensa con César Caneda (41 años) que suele generar muchas y muy buenas transiciones con Rubén Martínez, Ñoño o Zelu.

Pese a que muchos señalan a la escuadra rojiblanca como la más débil de las cuatro que concurren a este ‘play-off’ exprés en calidad de campeona, es un equipo que tiene muchos puntos fuertes. Destaca su capacidad goleadora y de generación con futbolistas de ataque muy físicos, Y detrás son muy seguros. Han encajado 19, y en 14 de los 28 encuentros disputados no vieron perforada su portería. Se les califica como un muro.

El Logroñés era un equipo que lo estaba realizando extraordinariamente bien, pero de repente apareció el covid-19 y les cortó la trayectoria. Hay que ver si este club que se fundó en 1967 podrá mantener esa dinámica ganadora en la vuelta a la competición. Será su cuarto ‘play-off a Segunda División para los riojanos. El último fue la pasada temporada, cayendo en segunda ronda contra el Hércules.