El granadino Juan Antonio López-Cózar (Fundación Ciclista Euskadi) se adjudicó el Gran Premi Vila-real de Ciclisme en una segunda etapa que ganó Mario García (Pérez Cánovas Nomar Spain Pemoy Kross) tras una fuga de casi 30 kilómetros en solitario.

El corredor del equipo murciano se quedó a solo 12 segundos de enfundarse el mallot de líder, ya que en la primera etapa perdió 35 segundos con López-Cózar y Óscar Cabedo, y ayer entró con una diferencia de 23 segundos respecto al pelotón, que llegó en un accidentado esprint, donde el provincial Cabedo cayó a tan solo 100 metros de meta, lo que le arrebató las opciones de victoria en el gran premio por el puestómetro. No obstante, al producirse la caída tan cerca de meta no perdió tiempo y mantuvo su segunda posición en la general. El tercer puesto fue para el brasileño Nicolas Sessler (Lizarte).

La etapa transcurrió muy rápida desde el inicio y se produjeron varios ataques inmediatamente posteriores a la salida desde Morella. Álvaro Martínez (Gsport Valencia Esport Wolfbike) y Jorge Ferrer (ULB Natural Freatness) saltaron en el kilómetro 5 y fueron aumentando su ventaja hasta los cinco minutos. Por detrás se iban formando grupos con perseguidores que fueron siempre neutralizados. Tan solo Cristobal Carnicer (Benicàssim Me Gusta Luk) mantuvo la persecución. Después del Coll de la Bassa, la Fundación Euskadi se puso a tirar del pelotón y redujo la distancia hasta que en el alto de Costur neutralizó la escapada.

Fue entonces cuando empezó la aventura en solitario de Mario García que llegó a distanciarse en 1.15 y mantuvo un bonito pulso con el pelotón, que no consiguió darle caza, pero sí que redujo su distancia. Así se alzó con el triunfo de etapa y obtuvo la quinta posición en la general.